Inmigrantes recién llegados en barcas a Canarias.EFE/Adriel Perdomo.

Baja tres puntos en un año el índice de tolerancia de los vascos hacia la inmigración

Bilbao (EFE).- El índice de tolerancia de los vascos hacia la inmigración ha bajado tres puntos en un año , según el estudio de Ikuspegi-Observatorio Vasco de Inmigración de 2023.

En concreto, el citado índice ha disminuido desde los 69,28 sobre 100 de 2022 a los 66,36 de este año

La cifra de 2023 es similar a la registrada en 2021.

El incremento de 2022 se relaciona con la “emergencia social” creada por la guerra de Ucrania.

Otro dato del estudio, basado en 600 encuestas realizadas el pasado mes de marzo, indica que la población no percibe la inmigración como un problema.

Solo el 4,7 % lo considera así.

La mayoría social apoya que la salud y la educación sean universales.

También la mayoría (77,2 %) espera que los inmigrantes “hagan el esfuerzo” de adaptarse a las costumbres locales.

El estudio refleja que la población vasca percibe que el volumen de extranjeros es casi el doble del que está realmente empadronado, cifrada en un 12,4 %.

Siete de cada diez cree que en los próximos cinco años aumentará la inmigración en Euskadi.

El 78,2 % opina que esta nueva población procederá del Magreb; el 62,5 % del África subsahariana, y el 62,3 % de Latinoamérica.

Acceso a derechos


Sobre el acceso a derechos, la mayoría (68,5 %) opina que debe ser igual para todas las personas.

Crece , sin embargo, once puntos (de 18,2 a 29,2 %) los que opinan que se debe dar prioridad a la población autóctona.

El estudio detecta que en el caso de la asistencia sanitaria o educación, una gran mayoría está a favor de que sea universal (84 % y 81 %, respectivamente).

En otro tipo de servicios como ayudas sociales, reagrupamiento familiar o viviendas de protección social, la mayoría considera que se debe limitar a los inmigrantes regularizados.

Respecto a las personas en situación administrativa irregular, casi la mitad de la población (47,5 %) mantiene que solo se debería regularizar a quien tenga un contrato de trabajo.

Un 34 % , en cambio, es partidario de otorgar permisos de residencia a todos.

En cuanto a los solicitantes de refugio o asilo, el 39,8 % opina que se les debe acoger solo si se demuestra que están perseguidos.

Un 37,4 % indica que hay que acogerles sin restricciones y un 15,9 % es partidario de una acogida basada en cuotas.

Inmigrantes recién llegados en barcas a Canarias.EFE/Adriel Perdomo.

Menores no acompañados


En el caso de los menores no acompañados, los denominados “menas”, ha crecido más de 10 puntos los partidarios de devolverles a sus países de origen (del 12,8 % al 23 %).

Un 40,3 % , por el contrario, sostiene también que hay que atenderles hasta llegar a un cupo.

Otro 30,4 % es partidario de proporcionarles pisos o residencias tuteladas.

Seis de cada diez personas creen que la llegada de estos menores y jóvenes sin referentes familiares afecta negativamente a la seguridad ciudadana.

Precisamente, una de las conclusiones del estudio es la “estigmatización” de ciertos colectivos.

Entre ello se cita a los procedentes del Magreb, que son los que despiertan menor simpatía y mayor recelo.

A esta situación se suma la escasa confianza hacia el Islam, cifrada en un 3,57 sobre 10.

Respecto a los “rumores y estereotipos”, el más mencionado entre los encuestados es que los inmigrantes viven de las ayudas sociales y abusan de ellas (72 %).

Le sigue la percepción de que con la inmigración aumenta la delincuencia (47,9 %).

En el aspecto económico, por el contrario, la población vasca cree que los inmigrantes ocupan puestos que los autóctonos no quieren (71,4 %).

El 69,8 % opina que algunos sectores de la economía necesitan de ese colectivo.

Mujeres inmigrantes


Ente año se ha preguntado por primera vez por la percepción de las mujeres inmigrantes con el resultado de que un 9,72 sobre 10 creen que tiene un efecto positivo.

Cerca del 90 % opina que son fundamentales en el trabajo de cuidados.

El 82,3 % opina que están en puestos que no se cubrirían de otra manera.

El 75,7 % afirma que la aportación social de estas mujeres es muy importante y el 74,9 % que contribuyen a la conciliación laboral y social en Euskadi.

Tras difundirse estos datos, la consejera vasca de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Nerea Melgosa, ha mantenido que arrojan “muchas luces y muchas sombras”.

Ha advertido sobre los actuales flujos migratorios a Canarias y ha augurado que “mes y medio después de abandonar esas islas, los migrantes terminan pasando por Irún”.

Hasta el pasado mes de septiembre, según ha dicho, se habían atendido en este paso a 2.140 personas, frente a los 5.196 del año pasado hasta el mismo mes. EFE