El lehendakari, Iñigo Urkullu, entre Eneko Andueza y Andoni Ortuzar. EFE/Adrian Ruiz Hierro

Urkullu escenifica con Ortuzar y Andueza su fin de ciclo antes de convocar elecciones

Vitoria (EFE).- El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha escenificado el final de su etapa al frente del Gobierno Vasco -que acabará definitivamente con la inminente convocatoria de las elecciones vascas- en una reunión con los líderes de los socios del Ejecutivo, Andoni Ortuzar (PNV) y Eneko Andueza (PSE).

La cita estaba convocada para hacer balance de la acción de gobierno en estos últimos cuatro años de coalición, analizar la situación política y hablar de las transferencias pendientes. Todo ello en la antesala de las elecciones, cuya fecha aún no ha anunciado Urkullu, aunque todo apunta a que serán en abril, con el día 21 como fecha más probable.

El reunión ha estado rodeado de un ambiente de fin de ciclo y de despedida, ya que Urkullu no será el candidato del PNV a lehendakari, cargo que ha ejercido durante doce años. Hoy Urkullu ha agradecido la “confianza y el apoyo leal” de PNV y PSE y ha puesto en valor los “buenos frutos” logrados por su Gobierno.

Tanto Ortuzar como Andueza han tenido palabras de reconocimiento hacia él. El primero ha alabado su “labor, dedicación y desempeño” en un ciclo con dificultades “extraordinarias” como la pandemia y las guerras de Ucrania y Gaza.

También ha destacado “el clima de colaboración, confianza y respeto” entre PNV y PSE, que pese a su mayoría absoluta han llegado a acuerdos con la oposición y que viven “un momento dulce” gracias a la aprobación de varias leyes en las últimas semanas.

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Andoni Ortuzar junto a Iñigo Urkullu. EFE/Adrian Ruiz Hierro.

Estabilidad de la fórmula PNV-PSE

Por su parte, Eneko Andueza ha ensalzado la estabilidad que su partido y el PNV han dado a las instituciones vascas en la última década, primero con pactos presupuestarios y en las dos siguientes legislaturas con gobiernos de coalición.

Andueza ha trasladado su “satisfacción por el trabajo desarrollado, en circunstancias especialmente difíciles, como la pandemia” y ha valorado la “colaboración sincera” entre los socios de Gobierno.

Además, ha agradecido a Urkullu su “dedicación y rigor”. Ha reconocido que en ocasiones han discrepado, pero siempre han coincidido en impulsar “unos acuerdos de gobierno que han sido buenos para el conjunto de la sociedad”.

El político socialista ha sido precisamente el primero en llegar a Ajuria Enea. Lo ha hecho a las 9.00 horas de la mañana. Urkullu lo ha recibido por Urkullu y tras posar para los medios de comunicación ambos han pasado al interior del edificio. Media hora después se ha repetido el ritual con Ortuzar, que se ha sumado a la reunión.

Este cónclave a tres bandas, que ha concluido pasadas las 10.30 horas, acelera de manera definitiva el reloj electoral tras el arreón de aprobación de leyes en este arranque de 2024.

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Iñigo Urkullu recibe a Eneko Andueza. EFE/ Adrian Ruiz Hierro

Tres competencias a punto de cerrarse

Entre los asuntos de enjundia pendientes queda el fleco de traspasar a Euskadi de las tres competencias que el PNV pactó a cambio de apoyar la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno.

Las de Cercanías y la de Homologación y Equiparación de Títulos Universitarios Extranjeros están bastante adelantadas, aunque la del sistema de acogida de migrantes van algo más lenta.

En todo caso los tres traspasos deberían concretarse en los tres primeros meses del año, con lo que unas hipotéticas elecciones vascas en abril se darían con esta cuestión ya zanjada.

Aunque la cita con las urnas aún no tiene fecha, Urkullu ha dicho varias veces que las elecciones de 2020 estaban convocadas el 5 de abril y que se aplazaron al 12 de julio por el covid. En esta línea ha defendido que el final de la legislatura debe calcularse en función de la fecha inicial del mes de abril.

Por ello Urkullu no ve “lógico” esperar hasta julio ni tampoco hacerlas coincidir con las europeas, que serán el 9 de junio.

Dentro del mes de abril, se han barajado distintas fechas pero el domingo 21 es a priori la que más posibilidades tiene de ser la elegida. Si finalmente Urkullu se decanta por ese día, deberá convocar las elecciones de manera formal el martes de la semana que viene, ya que deben pasar 54 días antes de la cita con las urnas.

El trámite electoral empezará con una reunión del Consejo de Gobierno para que Urkullu informe de la fecha de los comicios que después será publicada en el Boletín Oficial del País Vasco. A partir de ese momento, comienzan a contar los citados 54 días para unas elecciones que se presentan muy abiertas.