Reparto de agua con camiones cisterna en la localidad cordobesa de Pozoblanco por la falta de agua. EFE/ Salas

La sequía está obligando a limitar cada vez más el uso del agua, sobre todo en Andalucía y Cataluña

Madrid (EFE).- La situación de sequía prolongada que sufre España desde finales de 2021 y que no se prevé mejore en los próximos meses está obligando a limitar los usos del agua para garantizar la de consumo humano, sobre todo en Andalucía y el interior de Cataluña.

Restringir el riego de jardines y la limpieza de calles, prohibir el llenado de piscinas y fuentes o cortar el suministro de duchas en playas son algunas de las medidas más usadas para evitar poner en riesgo el “agua de boca” ante la escasez de precipitaciones.

En España, los Planes Especiales de Sequía (PES) distinguen entre sequía prolongada o meteorológica -derivada de la falta de lluvias y que ocasiona que los caudales se reduzcan de forma importante- y la escasez o sequía hidrológica, relacionada con posibles problemas de atención de la demanda (abastecimiento, regadíos, etc).

Esta última suele presentarse diferida en el tiempo respecto de la meteorológica, aunque puede evitarse o retrasarse gracias a la gestión del sistema o porque baje la demanda.

En situación de emergencia

Según el último informe de seguimiento de la sequía del Ministerio para la Transición Ecológica, a finales de mayo había 26 Unidades Territoriales de Sequía (UTS) en situación emergencia en las cuencas de Guadiana (7), Ebro (6), Guadalquivir (5), Mediterráneas Andaluzas (4) y 1 en las de Tajo, Segura, Tinto, Odiel y Piedras.

Con un 27 % menos de lluvias en el primer semestre respecto al mismo período del año pasado, los embalses españoles se encuentra al 46,5 % de su capacidad y almacenan 36.030 hm³, el 27,6 % menos que la reserva hídrica media de los últimos diez años.

Las cuencas en peor estado son las de Guadalete-Barbate (22,4 %), Guadalquivir (23,1 %), Guadiana (29,7 %), internas de Cataluña (30,6 %) y Mediterránea Andaluza (32,5 %), cuya situación contrasta con las de Cantábrico Oriental y Occidental (ambas al 90,4 %).
Por autonomías, según datos elaborados por Embalses.net, están por debajo del 50 %: Cantabria (44,2 %), Cataluña (47,3 %), Extremadura (46,5 %), Murcia (37,8 %) y Andalucía (25,8 %).

Asturias está al 91 %, Galicia al 71 %, Cantabria al 44 %, País Vasco al 73 %, Navarra al 67 %, Aragón al 50,5 %, Castilla y León al 62 %, La Rioja al 67 %, Madrid al 61 % y Comunitat Valenciana al 52,8 %.

Extremadura

En este contexto, en Extremadura, los nueve municipios de la Mancomunidad de Tentudía (Badajoz) sufren cortes nocturnos en el suministro de agua potable tras la activación de la fase III del Plan de Emergencia por Sequía, que prevé también cortes en extrarradios y la prohibición de regar jardines y zonas verdes, llenar fuentes o limpiar las calles.

Tampoco se pueden lavar vehículos ni llenar piscinas públicas ni privadas, una medida que sufren desde hace tiempo los 21 municipios de la Mancomunidad de Llerena (Badajoz), en los que el consumo de agua se ha limitado a 189 litros por persona y día.

Cataluña

En Cataluña, continúa la situación de excepcionalidad decretada el 2 de marzo en 495 municipios, incluida toda la conurbación barcelonesa y en los que viven más 6 millones de personas.

Esto conlleva restricciones en el uso del agua para regar parques y jardines (salvo el de supervivencia), agricultura (-40 % de dotación), industria (-15 %) y fines recreativos (entre -15 y -50 %).

Está prohibido llenar las piscinas particulares y la limpieza de calles y se limita el consumo de agua a 230 litros por persona y día, cantidad en la que se incluyen todos los consumos (doméstico, agrícola o industrial) pero que, en todo caso, supera el gasto habitual de un domicilio, por lo que a efectos prácticos no hay restricciones en el agua de boca.

Algunos municipios de Tarragona, como L’Espluga de Francolí, que no están conectados a la red pública de suministro y se abastecen de pozos, están en situación de emergencia desde hace más de un año y el agua les llega a través de camiones cuba.

Andalucía

En Andalucía, en el norte de la provincia de Córdoba, unos 80.000 vecinos del Alto Guadiato y Los Pedroches carecen de suministro regular desde finales de marzo, cuando el embalse de Sierra Boyera se secó y el agua procedente de La Colada llegaba contaminada por valores anómalos de carbono orgánico.

Limitar el uso del agua para garantizar el consumo cuando los grifos se secan
Reparto de agua con camiones cisterna en la localidad cordobesa de Pozoblanco por la falta de agua en el norte de la provincia

Desde entonces, y debido también a problemas en los grupos electrógenos que bombean el agua, los vecinos se abastecen mediante la recogida de agua en camiones cisterna.

Al sur de la provincia, en Lucena, se aplican cortes de suministro nocturnos debido a la bajada de los depósitos municipales en los últimos días y se ha reducido al mínimo el riego semanal en parques y jardines.

En Málaga, en cuatro municipios de la Axarquía (Vélez-Málaga, El Borge, Almáchar e Iznate) se efectúan cortes nocturnos de agua debido a la situación del embalse de La Viñuela, que los abastece y está al 9 % de su capacidad.

Colmenar recibe cuatro cubas diarias de agua y en el Rincón de la Victoria se ha cortado el suministro de duchas y lavapiés de playa. También aplican restricciones municipios de la Costa del Sol Occidental, como Torremolinos.

Otras localidades como Coín, Cártama o Alhaurín de la Torre han dictado bandos en los que recuerdan las restricciones de laJunta en el uso de agua potable para llenar piscinas privadas, regar jardines y lavar coches fuera de los establecimientos autorizados, así como en fuentes ornamentales sin circuito cerrado de agua.

La sequía ha llevado a algunos ayuntamientos de la costa de Cádiz, como Chipiona, San Roque, Vejer de la Frontera o Zahara de los Atunes, a eliminar las duchas y lavapiés de sus playas: según cálculos de grupos ecologistas, una ducha en la playa consume 120.000 litros de agua al día.

En el resto de autonomías, según los datos recabados por EFE, las autoridades no han acordado limitaciones, pero todas hacen un llamamiento a los ciudadanos para que hagan un uso responsable del agua.