La sanidad asturiana comienza a operar con el robot Da Vinci X. EFE/J.L.Cereijido.

La sanidad asturiana se refuerza con la precisión de la cirugía robótica

Oviedo (EFE).- La sanidad asturiana comenzará mañana a operar con el robot Da Vinci X, que permitirá a los cirujanos conseguir mayor precisión y alcanzar zonas en ocasiones inaccesibles en las intervenciones tradicionales, gracias al movimiento de 360 grados de los brazos autómatas, y sin comprometer la seguridad.

Para ello, el Servicio de Salud del Principado (SESPA) ha dotado de dos equipos de esta cirugía robótica de última generación al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), en Oviedo, y el Hospital Universitario de Cabueñes, en Gijón, que han supuesto una inversión de 13,6 millones.

El cirujano dirigirá la operación sin tener que estar sobre el paciente, a través de una pantalla de visión 3D de alta definición, que aumenta hasta diez veces la zona quirúrgica, dirigiendo mediante una especie de joystick los movimientos de los cuatro brazos en forma de araña del robot que le permiten llegar a zonas de difícil acceso.

Los profesionales sanitarios de los dos hospitales ya han recibido la formación necesaria para acoger mañana la primera operación robótica de la sanidad pública asturiana, que en el caso del HUCA supondrá la intervención de un cáncer de próstata a un hombre mayor de 60 años.

No obstante, el director de la Unidad de Gestión de Urología del HUCA, Jesús María Fernández Gómez, ha reconocido que “al principio” les costará realizar el montaje necesario para poder comenzar a operar dada la complejidad de estas intervenciones en las que hay que situar los cuatro brazos del robot respecto al paciente para pode tener una movilidad completa y coordinarlos con las tres enfermeras, tres urólogos y dos anestesistas que estarán mañana en el quirófano.

La sanidad asturiana comienza a operar con el robot Da Vinci X. EFE/J.L.Cereijido.

“Por lo menos, se necesitarán realizar hasta un veintena de operaciones para poder acortar tiempos que se asemejen a la duración de las laparoscopias”, ha calculado Fernández, que ha resaltado que la operación la realizan los cirujanos, empezando por el ayudante de urología que hace las incisiones para introducir los trocares, unos pequeños conductos que entrar en el abdomen, para luego el cirujano realice las extirpaciones con la ayuda y la precisión del robot.

Fernández ha indicado que el robot proporciona “una precisión mucho más fina para actuar en lugares más estrechos como la pelvis y con menor daño en los tejidos periféricos y en los nervios, con menor disfunción eréctil, y muy buenas disecciones que aseguran el resultado oncológico al extirpar todo el tumor, dañando lo menos posible la estructura periférica”.

El equipo quirúrgico, que lleva probando el robot durante las últimas tardes, ha recibido formación previa y tendrá la ayuda de un urólogo del Hospital Marqués de Valdecilla para esta primera operación.

La selección entre los 250 casos de cánceres de próstata registrados en el hospital va encaminada a los casos más preocupantes y espera que, “cuando alcance mayor rodaje”, incluir la cirugía robótica en cistectomías con reconstrucción intercorpórea de la vejiga o nefrectomías parciales.

Además de la cirugía urológica, el Sespa aplicará el sistema quirúrgico Da Vinci en las especialidades que lo permiten: ginecológica, general, torácica, pediátrica, otorrinolaringológica y maxilofacial. EFE