Oviedo (EFE).- La Federación Asturiana de Empresarios (FADE) cree que los pactos alcanzados para la investidura de Pedro Sánchez “crean inseguridad jurídica, desincentivan las inversiones y suponen un trato de favor a determinados territorios que sin duda irá en perjuicio de otros” como el Principado.
La patronal se ha pronunciado en estos términos tras reunir este jueves en Oviedo a su Consejo Ejecutivo y su Junta Directiva para abordar “la situación política actual de España y sus posibles efectos” para Asturias, según ha informado en un comunicado.
“Una vez formado el nuevo Gobierno, reiteramos nuestra preocupación sobre el riesgo que supone el contenido de los pactos para los pilares fundamentales del Estado: la separación de poderes, el Estado de Derecho y la igualdad de todos los españoles”, han expresado desde FADE, que ha remarcado que “estos principios, que nos han aportado 45 años de progreso reconocido internacionalmente, son innegociables”.
Tras incidir en que el contenido de los pactos “irá en perjuicio” de territorios como el asturiano, la patronal ha exigido al Gobierno del Principado “que defienda de forma decidida” la comunidad, “tanto en materia de inversión pública como regulatoria, reclamando igualdad de trato para que disminuya, y no aumente, la brecha” que le “separa del resto de España”.
FADE ha considerado “urgente centrar los esfuerzos de esta nueva legislatura en la generación de actividad económica como fuente de riqueza, empleo y sostenimiento del bienestar”, a la vez que ha insistido en “la necesidad de control y eficiencia del gasto público”, y de despliegue de “una fiscalidad más competitiva para empresas y trabajadores”.
Entre las prioridades marcadas desde la patronal se encuentran la simplificación administrativa, la reforma del sistema educativo para su orientación hacia el empleo, el “apoyo decidido” a la industria, el impulso a infraestructuras como el Corredor Atlántico o la ZALIA , y, “sobre todo, colocar en el centro de la política la competitividad de las empresas y su crecimiento, eliminando obstáculos y desplegando instrumentos eficaces de apoyo financiero como aspecto fundamental para mejorar la vida de los asturianos”.
Creciente intervencionismo
En su pronunciamiento, la patronal asturiana ha reivindicado que el diálogo social “debe seguir siendo una pieza clave del sistema”, en un momento en el que aprecia “con preocupación un creciente intervencionismo en materias esenciales para la vida empresarial, como el salario mínimo, despidos, horarios, beneficios empresariales…”, regulados “al margen de los empresarios y sin tener en cuenta las diferencias por sectores, tamaño de empresas o territorios”.
“Esto puede traer gravísimas consecuencias para la actividad y el empleo”, ha alertado la patronal, que ha exigido “la defensa decidida de los intereses de Asturias. EFE
