Oviedo (EFE).- El pleno de la Junta General del Principado de la próxima semana tramitará una proposición no de ley registrada por los grupos que sustentan al Gobierno de coalición, PSOE e IU-CA, que reclama la oficialidad del asturiano y del gallego-asturiano, una medida que requiere de una reforma estatutaria que quedó paralizada la pasada legislatura al no sumar los 27 votos necesarios para su aprobación.
La iniciativa reproduce la declaración aprobada recientemente en una reunión del nuevo Consejo de la Red de Normalización Lingüística que pedía impulsar la oficialidad para que ambas cuenten “con las mismas condiciones” que el resto de lenguas oficiales de España y señalaba que la diversidad lingüística nunca ha de verse como una amenaza, “sino como una oportunidad”.
La declaración, respaldada por la veintena de los 78 concejos asturianos -ninguno del PP- y de instituciones que acudieron a la reunión y que forman parte de ese órgano, fue impulsada por el alcalde de Bimenes, Aitor García, en presencia del presidente del Principado, Adrián Barbón, que se comprometió a trasladarla a la Cámara autonómica para ser ratificada.
La necesaria reforma del Estatuto para aprobar la cooficialidad requiere del voto favorable de las tres quintas partes de la Junta General, 27 de sus 45 escaños, una cifra que sumaban la pasada legislatura PSOE, Podemos e IU si contaban con el respaldo de uno de los diputados de Foro, que planteó una serie de condiciones en materia fiscal rechazas por el Gobierno, lo que hizo decaer esa iniciativa.
Con la configuración de la Cámara surgida de las últimas elecciones autonómicas, el apoyo a la oficialidad se limita a 23 diputados, al margen de la postura que pueda adoptar el único diputado forista, Adrián Pumares, que ha avanzado que “naturalmente” votará a favor de que la Junta General se adhiera a esa petición de varios ayuntamientos. EFE
