Un enfermero camina por el pasillo de un hospital. EFE/Juan Ignacio Roncoroni/Archivo

El gasto sanitario por comunidades: Asturias la que más invierte, Madrid la que menos

Madrid (EFE).- El gasto que en 2024 las comunidades destinarán a la sanidad sube en todas las autonomías si bien persisten las diferencias. Asturias se mantiene como la comunidad que más invertirá por habitante (2.311,16 euros) y Madrid sigue siendo la que menos destina per cápita (1.468,38 euros), hasta 842,78 de diferencia.

Según un análisis de la Federación de Asociaciones en Defensa de la Sanidad Pública (FADSP), publicado este lunes, se constata en el conjunto del país un crecimiento medio de los presupuestos sanitarios por habitante de 90,74 euros, al pasar de los 1.815,55 euros de este año a los 1.906,29 de 2024.

Esta diferencia supone un 4,99% más, subida que para la FADSP es “claramente insuficiente” dadas las necesidades del sistema sanitario y el aumento de la inflación prevista para este año, que roza el 4%.

Madrid, el presupuesto más bajo por quinto año consecutivo

La FADSP pone el acento en la Comunidad de Madrid que se mantiene con el presupuesto más bajo por quinto año consecutivo y recuerda que, la plataforma de asociaciones en defensa de la sanidad pública lleva reivindicando desde 2022 un aumento de 1.000 per cápita, para no seguir por debajo de la media de la Unión Europea en cuanto a gasto sanitario.

En el análisis, la FADS también señala que tres comunidades autónomas prorrogan para 2024 el presupuesto de 2023: Castilla y León, Navarra y Cataluña. La FADSP considera que en las dos primeras comunidades parece que no habrá problemas relevantes para su definitiva aprobación en marzo de 2024, si bien en el caso de Cataluña advierte de que la “situación es menos clara y resulta difícil pronosticar si se aprobarán o no nuevos presupuestos”.

En el análisis, la FADSP subraya que los presupuestos que aprueban las comunidades son un indicador de su “preocupación” por el sistema sanitario, y de su interés a responder a los problemas de la sanidad pública en un momento de “desfinanciación crónica”, y teniendo en cuenta que el gasto sanitario de las comunidades es el 92,1% del gasto sanitario público total.

Concluye el informe de la FADSP que un gasto “escaso y mal repartido” hace que se mantenga la insuficiencia financiera global del sistema sanitario y “consolida las desigualdades territoriales”.