La presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, durante una entrevista con la Agencia EFE. EFE/ Pedro Puente Hoyos

Buruaga: Este Gobierno no va a consentir que se arrase nuestro territorio

Santander, 24 may (EFE).- La presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, ha afirmado este viernes que las protestas contra el desarrollo urbanístico de Ribamontán al Mar son un ejemplo de “la política ficción” que lleva a la crispación y la alarma social y ha subrayado que la apuesta de su gobierno es un modelo de turismo sostenible que preserve los valores y la identidad de la región.

“Este Gobierno no va a consentir que se arrase nuestro territorio”, ha asegurado, en declaraciones a EFE, la presidenta, quien ha recordado que el proyecto que salga adelante en Ribamontán al Mar será el que permita su plan general, que obtuvo el visto bueno del anterior Ejecutivo PRC-PSOE en 2021, ha recordado.

Según Buruaga, lo primero que hay que dejar claro es que ni hay un macroproyecto en Ribamontán al Mar ni existe “la Ibiza del norte”, una expresión que utilizó un promotor que no tiene la propiedad de los terrenos “ni ha presentado en ninguna parte ningún proyecto”. Y además sería “inviable” con la legislación en la mano.

“Eso es lo que probablemente no saben muchos de los ciudadanos que se manifestaban, pero sí saben los responsables políticos que los estaban alentando”, ha añadido.

Y ¿qué va a salir adelante en Ribamontán al Mar? “El proyecto que prevea su Plan General de Ordenación Urbana que doy por hecho que es razonable, sensato, sostenible, entre otras cosas porque tienen la aprobación del Ayuntamiento y de la CROTU (Comisión Regional de Ordenación del Territorio y Urbanismo) en el año 2021, el visto bueno del Gobierno anterior y del señor (Pablo) Zuluaga, que era vicepresidente de ese Gobierno y sabe perfectamente lo que se puede hacer ahí”, ha señalado.

El revuelo político y mediático que ha levantado el futuro desarrollo de este municipio costero, al que acudieron miles de personas a manifestarse el fin de semana pasado, convocados por Cantabristas, es para la presidenta, “un ejemplo muy claro de esa política ficción a la que estamos asistiendo”.

Un ejemplo, ha abundado, “de cómo se puede inventar una manipulación, de cómo jugar con las emociones, con los anhelos, con las expectativas legítimas de los ciudadanos puede llevar a la crispación, a la movilización, al desasosiego, a generar una alarma social absolutamente infundada”.

La identidad y el atractivo de Cantabria

Y frente a quienes pretenden, a su juicio, “generar alarma y jugar con las personas”, su mensaje es que el Gobierno “no va a consentir que se arrase” el territorio porque tiene claro que ese territorio, “los valores naturales, los valores paisajísticos, la forma de vida, los valores tradicionales, además de ser identidad de Cantabria, son su principal atractivo”.

“Es lo que nos hace diferentes, es lo que genera valor añadido y por lo tanto, hay que preservarlos. Además de que somos un Gobierno que nunca va a cruzar la línea roja de incumplir la legalidad”, ha apostillado.

Según la presidenta, el Gobierno apoyará los proyectos empresariales que generen actividad y riqueza en el territorio, sobre todo, “donde más donde hace falta vida, en las zonas rurales”, pero de una forma “racional, sostenible, ordenada y estableciendo todas las garantías, todas las prevenciones para que los impactos sean mínimos”.

“Todos hemos entendido cuando nuestra región se ha puesto de moda, ahora que se ha convertido en un refugio climático y la gente viene y vuelve, que tenemos que saber administrar este potencial inmenso, este potencial turístico que tenemos. Y el Gobierno de Cantabria lo está dejando muy claro: nosotros apostamos por un desarrollo turístico muy vinculado a la cultura, muy vinculado al patrimonio, muy vinculado al conocimiento, que aporta calidad y valor añadido”, ha subrayado.

La dirección en la que hay que avanzar, a su juicio, es la desestacionalización, la descentralización, distribuyendo los beneficios que genere el turismo por todo el territorio, y la internacionalización. “Y ahí es muy importante esa apuesta que estamos haciendo por la cultura”, ha apuntado.

El plan de Santillana del Mar

La presidenta ya da por “absolutamente solventada” la polémica por el plan de sostenibilidad turística de Santillana del Mar y admite que ha habido “un problema de comunicación”.

“Es algo que se tenía que haber explicado mejor, pero de todo se aprende”, ha reconocido Buruaga, quien cree que no se ha sabido transmitir bien lo que estaba haciendo el Gobierno y por qué.

En su opinión, en este caso se ha unido que se estaba hablando de “cuestiones técnicas de las interioridades administrativas”, que los ciudadanos probablemente no entiendan bien, y “el ruido político”.

“Ha habido personas en esta pequeña polémica que, lejos de buscar soluciones, han querido alentar el enfrentamiento entre las instituciones, buscar ruido o estirar el chicle”, ha lamentado.

Según Buruaga, ante las reiteradas denuncias de una empresa, los técnicos informaron de “una serie de defectos o de irregularidades” y lo que se ha hecho es que eso “se subsane y se retrotraiga” para hacerlo bien.

“¿Por qué? ¿Porque alguien disfrutaba quitando tres millones del plan de sostenibilidad turística de Santillana a los vecinos de Santillana?… Todo lo contrario, lo que se trataba era de garantizar la seguridad jurídica de un procedimiento en el que hay fondos europeos que están sometidos a un férreo control y mañana se podían derivar problemas”, ha justificado.

Autora: Lola Camús