avier Escalada (i), diputado gran maestro de la Gran Logia de España, y Shaun Parson, gran maestro de la Gran Logia Provincial de Andalucía, hablan sobre el papel solidario de la masonería . EFE/Rafa Alcaide

La solidaridad, parte del proceso formación personal en la masonería

Álvaro Vega I Córdoba, (EFE).- La práctica de la solidaridad en la masonería forma parte del proceso de perfeccionamiento como persona, una formación que tiene que revertir a la sociedad y que en Andalucía tiene más dimensión en las logias de habla inglesa que en las españolas, al tener un mayor número de miembros.

“Hay una parte de ese en el papel de formación del masón que se considera que es un valor muy importante, porque todo el trabajo que hacemos para perfeccionarnos como personas tiene que revertir a la sociedad”, señala en una conversación con EFE Javier Escalada, diputado gran maestro de la Gran Logia de España, el segundo máximo cargo de la masonería española.

Escalada, que ha asistido a las VIII Jornadas sobre la Presencia de la Masonería en Córdoba, subraya que “realmente un valor como es la solidaridad tiene sentido cuando está en relación con los demás en una estrecha relación de ayuda mutua”.

Precisamente, la solidaridad ha sido el eje del encuentro, celebrado durante el fin de semana, en un intento de normalizar las relaciones de la masonería con la sociedad.

Pequeñas acciones de solidaridad

El dirigente de la orden iniciática aseguró que “la masonería en sí hace acciones de solidaridad, pero por el tamaño que tenemos en España, realmente no son muy significativos, son más pequeñas acciones que se hacen a nivel local en diferentes ciudades”.

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Javier Escalada (i), diputado gran maestro de la Gran Logia de España, y Shaun Parson, gran maestro de la Gran Logia Provincial de Andalucía, hablan sobre el papel solidario de la masonería . EFE/Rafa Alcaide

En Andalucía, “las logias de habla inglesa tienen más miembros y pueden dar más dinero a la caridad”, un término que en la masonería que se utiliza como sinónimo de solidaridad, afirma a EFE Shaun Parson, gran maestro de la Gran Logia Provincial de Andalucía.

Se dan casos, señala, en el que algunas logias “quieren ayudar en cuidados del cáncer o el alzheimer, como una aportación bastante importante para la enfermedad de la piel de mariposa que hicimos hace unos años, en la que recaudamos unos 70.000 euros”.

Pero cada logia decide a qué actividad ayuda, coinciden Escalada y Parson. Por ejemplo, en la de Madrid a la que pertenece el primero “colaboramos habitualmente con una fundación que trabaja con personas sin techo”. Donan dinero “y a veces también se hace un saco de solidaridad especial cuando hacen comedores especiales en algunas fechas, que, en ese caso, vamos alguno de los masones a servir”.

En Málaga, en la que está Parson, en cambio, “tenemos una asociación que trata de ayudar a los pobres que están en la calle, pues cada logia lo que hacen es tomar una decisión sobre lo que es la beneficencia de cada año”.

El saco con la mano cerrada

¿Y cómo se recauda el dinero? “La masonería en sí es un método de formación, lo que es peculiar es cómo se desarrolla, que siempre es a través de muchos símbolos, alegoría, eso es lo más peculiar”, recuerda el diputado gran maestro de la Gran Logia de España.

De ahí que señale que “una de las características de nuestras reuniones, que llamamos tenidas, es que al final se pasa lo que llamamos un saco de solidaridad, donde a todas las personas se les invita a que echen un dinero, lo echan con la mano cerrada, no se sabe el dinero que echan, y es un fondo de solidaridad que va a la logia”.

Ese es el fondo que se genera y que se destina a un objetivo. La logia cordobesa que organiza las jornadas, la Simbólica Maimónides 173, destinó su fondo de 2022 a alimentos de primera necesidad que entregó al Banco de Alimentos de Córdoba en diciembre pasado.

Sobre la situación de la masonería en España, Javier Escalada reconoce que “es complicado crecer en este país”, pese a que en España la masonería nunca ha sido muy importante el número”.

Los grandes objetivos es el pequeño trabajo

No lo ve como un problema porque “tampoco tenemos una inquietud en cuanto a crecer mucho en número, nos preocupamos más en cuanto a la calidad y, desde luego, con la vuelta a la democracia ya habido un resurgimiento de la masonería bastante importante”.

A su juicio, “estamos en una fase de estabilidad, pero también adaptándonos un poco al entorno y los hechos de los últimos tres años afectan a toda organización, la pandemia y la crisis socioeconómica”.

En todo caso, enfatiza, “nos estamos adaptando, pero creo que ya estamos en una actividad normalizada”, donde “trabajamos para el futuro”, donde “los grandes objetivos es el pequeño trabajo”.

En esta línea se han planteado las jornadas, “de normalizar una relación con la ciudad de Córdoba y que vean que somos personas que trabajamos unos valores tan importantes y tan positivos como puede ser la solidaridad y la ayuda mutua y que nos vean como una gente más social, ni más ni menos”. EFE