María Tajadura I Jaén, (EFE).- Seis siglos después de la expulsión de los judíos de España, en virtud del decreto firmado por los Reyes Católicos en 1492, los sefardíes aún mantienen vivo el recuerdo y regresan a la tierra que moraron sus antepasados para conocer su origen dejando al lado los resentimientos.
Es el caso de León Shocrón, bisnieto del gran rabino Sabetay Djaén. Que durante estos días visita Jaén para pasear por la judería e indagar sobre la vida de su antepasado. Que tuvo un papel fundamental a principios de siglo por su defensa a los sefardíes dentro de las comunidades sionistas.
Al dramaturgo judeo-español Sabetay Djaén, que nació en Bulgaria aunque nunca olvidó su origen español, en 1935, le distingue el presidente Niceto Alcalá Zamora. Con la Orden del Comendador de la República. Por su inmensa y valiosa obra en defensa de los judíos sefardíes para que se derogue el decreto de expulsión.
Sabetay tuvo tal influencia en Jaén que fue nombrado Hijo Predilecto y recibió la Medalla de Oro de la ciudad. Y sigue siendo recordado, por ejemplo, cuando uno de los edificios de la ciudad, la Universidad Popular Municipal (UPM) ubicada en la judería, toma su nombre ‘Sede Sabetay’. Un letrero que es admirado por su bisnieto cuando camina por esta zona de Jaén.
Antepasados expulsados
León llama la atención de un detalle que pasa desapercibido por los viandantes ajenos a la tradición judía. Cuando relata que en uno de los letreros que marcan el rumbo, con la palabra ‘Judería’ y el símbolo clásico de la ‘Estrella de David’. La estrella está totalmente dañada con aerosol negro, pero luego alguien pintó un corazón al otro lado.
“Este hecho demuestra que siguen coexistiendo grupos intolerantes con grupos que abogan por la multiculturalidad. Pero se ha avanzado mucho y cada vez existen más comunidades de judíos” explica León Shocrón a EFE.
Cumpliendo la ilusión de sus antepasados expulsados que se llevaron las llaves de sus casas con la esperanza de que algún día volverían, actualmente descendientes de esos ‘sefaradim’, o ‘españoles’ en hebreo, regresan de Marruecos. Países latinoamericanos y Europa, para asentarse definitivamente en nuestro país.
Se estima que la comunidad judía oscila entre 15.000 y 40.000 en España. Viviendo una mínima parte en Andalucía, especialmente en Málaga, y concentrándose la mayoría en Madrid y Barcelona.
Estas comunidades están experimentando un gran crecimiento. Y, poco a poco, se van consolidando gracias a las acciones reivindicativas que comenzaron a principios del siglo XX, con la participación del Gran Rabino Sabetay Djaen. Hasta momentos recientes con legislaciones que reconocen a los sefaradíes como españoles.
Las tres culturas de Jaén
“Por supuesto, el espectro político español ha dado en general acciones muy positivas, como las anteriores. Y también algunas muy negativas y de corte claramente antisemita” sostiene este empresario nacido en Argentina. Que se define como judío sefardí y que también aporta su granito de arena en la defensa de sus antepasados.
Así, forma parte activa de la Asociación Socio Cultural ‘Iuventa’, que dirige Rafael Cámara, y que tiene como objetivo poner en valor las tres culturas que alberga Jaén: la cristiana, la musulmana y la judía, que van floreciendo y dejando huella, gracias a que buena parte de la población quiere reivindicar sus costumbres y tradiciones, de hecho, Jaén pertenece ya a la Red Nacional de Juderías.
“Creo firmemente que la obligación de todos nosotros es, sin dejar de ver lo malo que aún existe en distintos puntos de la sociedad, promover lo bueno, construir desde el pluralismo y aportar al progreso, crecimiento e integración” ha concluido León Shocrón. EFE
