El coordinador general del PP, Elías Bendodo, y el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, al fondo. EFE/ Javier Cebollada

Bendodo pide a Lambán que sus diputados voten contra la reforma de sedición

Zaragoza (EFE).- El coordinador general del PP, Elías Bendodo, y el presidente del PP de Aragón, Jorge Azcón, han exigido este martes “coherencia” al presidente y secretario general del PSOE en Aragón, Javier Lambán, para que “con votos” se oponga a la modificación del delito de sedición.

Bendodo y Azcón han comparecido ante los medios ante la sede del Ejecutivo aragonés en Zaragoza para exigir a Lambán que “dé instrucciones” a los seis diputados nacionales y seis senadores socialistas aragoneses para que voten “en coherencia” con la postura mostrada por el líder socialista en Aragón. Lambán, han insistido ambos, “no está a favor” de lo que está haciendo el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

El presidente aragonés tiene una oportunidad de ser “coherente” o mostrar “cinismo”, ha advertido Azcón, quien ha reclamado a Lambán “valor” para votar de acuerdo a lo que ha manifestado.

“Si actúa en consecuencia con lo que ha dicho, la abolición del delito de sedición se puede parar”, ha insistido Azcón. Ha añadido que los barones del PSOE que dicen que están en contra de perpetrar “un hecho contra la Constitución y la democracia española” deben pedir a los diputados y a los senadores de sus respectivas comunidades que “voten en coherencia” para parar “este atentado contra la democracia que el PSOE y sus socios quieren hacer”.

Distanciarse del sanchismo

A este respecto, Bendodo ha añadido que si no lo hace, Lambán habrá hecho esas declaraciones por “tacticismo político”, porque sabe que hay elecciones en pocos meses y quiere “distanciarse del sanchismo”, por lo que estará “engañando a los aragoneses”.

Para el coordinador general del PP, España vive “uno de los días más tristes de los últimos años” de su historia democrática” . Ha agregado que Sánchez ha llegado “muy lejos arrastrando el nombre de España por el suelo” y se ha “arrodillado ante el independentismo” y cedido a “todas sus pretensiones” para mantenerse “seis y ocho meses más” en el cargo y aprobar unos presupuestos.

El presidente debe entender, ha ahondado Bendodo, que los independentistas “no se conforman con un único pago”. El primero, ha apuntado, ha sido la abolición del delito de sedición, el segundo va a ser la modificación del delito de malversación y el tercero, “ya lo han dicho los independentistas catalanes, va a ser empezar a hablar otra vez de referéndum en Cataluña”.

Lambán: ‘Que no mendiguen votos’

El presidente de Aragón, Javier Lambán, en una imagen de archivo. EFE/ Toni Galán

Por su parte, Javier Lambán ha replicado a Bendodo y ha pedido al PP que deje de “mendigar” los votos socialistas en el Congreso y el Senado y, “si se ve con robustez”, que presente entonces una moción de censura. Pero “no se atreve”, ha dicho Lambán, porque carece de “fuerza, coherencia y credibilidad”.

Lambán ha vuelto a reconocer que no está de acuerdo con el cambio en el Código Penal, pero ha lamentado que se le pretenda utilizar. “El PP, conmigo que no cuente para secundar sus estrategias políticas en un asunto en el que demuestra una notable incapacidad para presentarse como proyecto alternativo”, ha dicho.

Y ha considerado que si el Partido Popular fuera “coherente” y una alternativa “fuerte y seria”, si creyera en sus posibilidades, en lugar de “mendigar el apoyo de los diputados socialistas, incitándoles a la rebelión”, presentaría una moción de censura.

El PSOE, además, no sería “un partido serio” si cada diputado votara cosas distintas en el Congreso en función de la provincia a la que pertenece, y es “cínico” que el PP sea eso o que exige cuando siempre ha actuado como una “maquinaria militar” en el que todos sus parlamentarios votan lo que decide el partido. “Salvo que se equivoquen, que puede ocurrir”, ha ironizado.

Lambán ha asegurado que él se caracteriza por decir lo que piensa y anteponer a Aragón por encima de cualquier otra consideración, algo que es su obligación” aunque eso le suponga a veces estar “en absoluto desacuerdo” con el Gobierno de España y con Pedro Sánchez.