Asociaciones vecinales y en defensa del patrimonio histórico realizaron este miércoles en Santa Cruz de Tenerife "60 segundos de silencio" dentro de la campaña nacional contra el ruido. EFE/ Miguel Barreto

Reclaman acciones para cumplir la ley del ruido, que es “maltrato acústico”

Santa Cruz de Tenerife (EFE).- Asociaciones de vecinos, de defensa del patrimonio histórico y contra el ruido, han reclamado ante el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife que se cumpla la Ley del Ruido y no se eviten sus disposiciones con decretos de la Alcaldía porque, advierten, este contaminante supone “un maltrato acústico”.

Silvia Barrera, presidenta de la asociación de vecinos El Perenquén, de la zona centro de la capital tinerfeña, ha leído este miércoles un manifiesto ante la sede del consistorio en coincidencia con la concentración nacional de la “Campaña contra el ruido 2023”, un acto que se ha iniciado con 60 segundos de silencio.

En el manifiesto se ha recordado que, según la Organización Mundial de la Salud, más de mil millones de jóvenes están en riesgo de padecer pérdida auditiva y además el ruido se ha relacionado con demencia, ictus, enfermedades cardiovasculares, depresión, ansiedad, absentismo laboral y escolar, e incluso depreciación de las viviendas situadas en entornos ruidosos.

“El ruido mata. Es urgente un debate social sobre la contaminación acústica porque nuestra salud está en juego”, ha indicado Silvia Barrera, para señalar que hay técnicas para evitar este contaminante que deben aplicarse “sin demora” con un adecuado aislamiento y acondicionamiento.

Aún así, hay fuentes de ruido incompatibles con zonas residenciales “y la distancia del foco ruidoso es la única solución posible” pero sin el respaldo del conjunto de fuerzas políticas y de la ciudadanía dichas medidas “no serán efectivas ni sostenibles”, ha precisado.

Los convocantes de la concentración han sostenido que las administraciones públicas deben trabajar en planes de acción para conseguir ciudades más saludables e integradoras, pues la contaminación acústica “es uno de los problemas más graves y urgentes a tener en cuenta, un veneno invisible”.

“Con ruido no hay calidad de vida ni salud”, ha proseguido Silvia Barrera, quien posteriormente en declaraciones a los periodistas ha considerado que hoy se ha dado un paso “muy importante”, pues es la primera vez que en toda España se han unido las organizaciones con el mismo objetivo, concienciar contra el ruido.

El problema, ha añadido, es que se ha convertido a la ley “en papel mojado” y de ello los responsables son los ayuntamientos, para lo que ha puesto de ejemplo el de Santa Cruz de Tenerife que, a su juicio, ha sacado una ordenanza en este ámbito que no recoge el espíritu de la norma.

“Santa Cruz tiene que cumplir la ley y no puede ser que haya un decreto de la Alcaldía para que un promotor privado haga una fiesta a las puertas de alguien que al día siguiente tiene que trabajar, no se puede funcionar así ni poner altavoces en las calles pegados a los salones de las casas con villancicos en continuo porque no se está cumpliendo la ley”, ha advertido la portavoz vecinal.

Lo triste, ha añadido, es que al final es cuestión de dinero porque quien recurre a los juzgados “gana” las sentencias “y los que provocan la contaminación están en la cárcel”.

Barrera ha señalado al respecto que “no hay nada que inventar” porque lo primero que hay que hacer es “cumplir la ley” y ha recordado que en su momento la Unión Europea “tiró de las orejas” a España por los reiterados incumplimientos de la Directiva en este ámbito.

“Es una cuestión de educar”, ha subrayado la portavoz vecinal, quien ha reiterado además que quien no puede dormir ni descansar debe abandonar su casa y no lo consigue “porque se ha devaluado tanto” que al final ni la puede vender ni comprar otra “porque nadie quiere ir a vivir a un sitio donde no se puede descansar”.

La concentración de este miércoles ha sido convocada por la Sociedad Española de Acústica, la Confederación Estatal de Asociaciones Vecinales, la Asociación contra la Contaminación Acústica y en Defensa del Patrimonio Histórico y la Federación de Asociaciones contra el Ruido. EFE