Santander (EFE).- Cantabria tendrá un presupuesto para el próximo año de 3.504 millones de euros, con un incremento del 4,9 por ciento con respecto a este ejercicio, y que destinará casi el 70 por ciento del total a “blindar” el estado de bienestar.
Así lo ha avanzado el vicepresidente, Pablo Zuloaga, en la rueda de prensa para informar de los acuerdos del Consejo de Gobierno, que este jueves ha aprobado el Proyecto de Presupuestos del Ejecutivo regional para 2023, que destinan casi 2.435 millones de euros a sanidad, educación y políticas sociales.
Antes de que la consejera de Economía y Hacienda, Ana Belén Álvarez, presentase hoy esas cuentas en el Parlamento de Cantabria para el inicio de su tramitación, Zuloaga ha dado a conocer algunos datos del presupuesto, que crece en 178 millones de euros y supera por primera vez los 500 millones de euros de inversiones “para consolidar la recuperación económica”.
Está previsto que entren en vigor el 1 de enero de 2023, se han elaborado con un techo de gasto de 3.051 millones, un 6,45 por ciento superior a este ejercicio.
Además, se dota con un fondo de contingencia de 14 millones de euros para hacer frente a imprevistos ante la actual coyuntura internacional.
Para estos presupuestos, el Gobierno de Cantabria, según ha explicado el vicepresidente, contempla recibir 2.159 millones de euros de entregas a cuenta, un 8,7 por ciento más que este año, y las partidas presupuestarias del Gobierno de España destinadas al Mupac, La Pasiega y las obras del hospital de Valdecilla.
Por su parte, el Ejecutivo regional ha explicado que transferirá a las entidades locales más de 116 millones de euros para programas sociales, de empleo e inversiones.
Presupuesto “social, inversor y equilibrado”
La consejera de Economía ha destacado el carácter “social, inversor y equilibrado” de las cuentas.
“Son realistas, miran al futuro porque reducen la deuda pública, pero sin olvidarse del presente porque mejoran el Estado de Bienestar en Sanidad, Educación y Políticas Sociales”, ha subrayado Álvarez.
A su juicio, todo ello con una política fiscal “favorable a la recuperación económica y el empleo, sin subida de impuestos y creando un marco fiscal beneficioso para quienes realmente lo necesitan: las rentas medias y bajas”.
Todas las consejerías y organismos autónomos van a ver reforzados sus propios presupuestos.
Las que más crecen son sanidad (60 millones de euros), educación (30 millones) y políticas sociales (24 millones), seguidas por Industria, que dispondrá de 157 millones -18 más-.
El presupuesto de la Consejería de Economía crece un 44 por ciento, de 47 a 64 millones de euros, que se explica por la creación del Fondo de Contingencia.
“Es una mínima red de seguridad a la que poder recurrir de manera inmediata sin tener que depender del efecto dominó que puede suponer sobre el resto del presupuesto”, ha explicado.
Como curiosidad, ha apuntado, la Consejería de Presidencia destinará 2 millones de euros a gastos asociados a la celebración de las elecciones autonómicas y municipales de 2023.
Escenario financiero, deuda y tributos
La previsión del Ejecutivo es cerrar el próximo ejercicio con un déficit del 0,3 por ciento, frente al 0,6 % del curso actual. así, el año que viene se reduce este desfase a 49,7 millones de euros a los 90 previstos de este año.
Además, se espera que en 2023 la deuda pública termine en el 21,6 por ciento, un 4,5 % menos que al cierre de 2020, con la previsión de acabar el año que viene con la deuda pública de vuelta a niveles prepandemia.
Aun así, en el presupuesto de Cantabria del próximo año se destinarán 423 millones de euros a cumplir con los compromisos financieros.
La propuesta fiscal del Gobierno, ha defendido la consejera, es “progresiva, rigurosa y sostenible”, con un total de 18 deducciones, algunas de ellas recientemente adoptadas.
De esta forma, los cántabros dejarán en sus bolsillos más de 33 millones de euros en la declaración del IRPF correspondiente al 2022, frente a los 16 millones del ejercicio anterior.
El techo de gasto se ha fijado en 3.051 millones de euros, con un incremento del 12,9 por ciento de la recepción de fondos del sistema de financiación autonómica, hasta los 2.295 millones.
Se incorporan en este apartado 194 millones de euros procedentes de los fondos europeos, así como los ingresos de transferencias desde el Gobierno.
