Toledo (EFE).- Las Cortes de Castilla-La Mancha han aprobado este jueves la Ley de medidas administrativas, financieras y tributarias, conocida como Ley de Acompañamiento a los presupuestos, con los votos a favor del PSOE y la abstención del PP y Ciudadanos (CS).
Durante el pleno de las Cortes regionales, el Gobierno de Castilla-La Mancha y el PSOE han defendido la nueva normativa porque servirá para “aliviar” la situación económica actual y beneficiará al 87 por ciento de contribuyentes.
Así lo ha destacado el consejero de Hacienda y Administraciones Públicas, Juan Alfonso Ruiz Molina, que ha incidido en que el “paquete de deducciones” que incluye la ley tiene como finalidad “favorecer a las familias y proteger a las rentas medias y bajas frente a los efectos de la inflación”, así como fomentar la inversión empresarial, con seis deducciones fiscales de las que cuatro están dirigidas en concreto a las familias.
En este sentido, ha recalcado que estas medidas permitirán “aliviar la situación del 87 % de contribuyentes de la región” con un coste estimado de 85 millones de euros, y que entrarán en vigor con efectos retroactivos y se harán efectivas en la Campaña de la Renta de 2022.
“Un ejercicio de responsabilidad”
El titular de Hacienda ha reivindicado que el contenido de esta normativa supone un “ejercicio de responsabilidad y rigor” a la hora de administrar los recursos públicos, a través de una bajada de impuestos compatible con el mantenimiento de la calidad de los servicios públicos.
Sin embargo, ha lamentado que las enmiendas parciales presentadas por el PP insisten en su petición de una bajada generalizada de impuestos que se traduciría en 665 millones que, sumados a los 1.000 millones que promete reducir si gana las elecciones, llevaría a “recortes” para equilibrar el presupuesto, ha advertido, y “los recortes de Cospedal serían cosa de niños, en comparación”.
En cuanto a las enmiendas de Ciudadanos (CS), Ruiz Molina ha apuntado que suponen una merma de 208 millones pero, a la vez, suma 200 millones por su petición de recuperación de la carrera profesional, lo que para Ruiz Molina denota la “demagogia” de la formación naranja.
El PSOE acusa de “marxistas y bolivarianos” a la oposición
En la misma línea, el presidente del grupo socialista y ponente del dictamen de la Comisión de Economía y Presupuestos, Fernando Mora, ha subrayado que la Ley de Acompañamiento está “acompasada” con la situación actual y ha instado a la oposición a reflexionar su voto porque en la comisión se abstuvo al 90 % de la ley.
Mora ha acusado de “marxistas y bolivarianos” a CS y PP, respectivamente, por las peticiones de bajadas de impuestos que proponen, al tiempo que ha indicado que parecen estar en una competición a ver quién presenta “dos huevos duros más”, y ha considerado que “la demagogia de los impuestos ha acabado sepultada con las necesidades de la sociedad”.
PP reprocha “maquillaje fiscal” y “pirotecnia tributaria”
Por su parte, el diputado regional del PP Miguel Ángel Rodríguez ha dicho que la Ley de Acompañamiento es “criticable tanto en la forma como en el fondo” porque es un “cajón desastre” para modificar hasta 12 normas regionales y porque demuestra que el Ejecutivo socialista está “agotado” y no acepta las propuestas “sensatas” que realiza el Partido Popular.
Rodríguez ha reprochado el “maquillaje fiscal” y la “pirotecnia tributaria” que, a su entender, lleva a cabo el Gobierno regional y que beneficia a colectivos muy determinados y a “poca gente”, al tiempo que ha defendido que la que plantea el PP es la “verdadera bajada de impuestos” que necesita Castilla-La Mancha.
CS no se opone a una bajada de impuestos
De su lado, el portavoz de CS, David Muñoz, ha afeado a Ruiz Molina su actitud desde que empezó a tramitarse el presupuesto para 2023 y aún así ha vuelto a exponer la “mano tendida” de la formación naranja para llegar a acuerdos, si bien ha afirmado que CS no puede oponerse a una ley que baja impuestos pero tampoco puede apoyarla por su “tacañería”.
A este respecto, ha lamentado que la norma solo propone una reducción de ingresos de 85 millones de euros para costear las rebajas fiscales pese a que el Gobierno autonómico estima que ingresará 1.000 millones de euros más este año, producto de la inflación. EFE
