Un año más, y ya van treint y siete, el folclorista salmantino Ángel Rufino de Haro, 'El Mariquelo', asciende a una de las zonas más altas de la Catedral Nueva de la ciudad, en una tradición que recuerda el terremoto de Lisboa de 1755, que se sintió en Salamanca pero no produjo víctimas. EFE/J.M. García

El Mariquelo eleva al cielo de Salamanca la causa de los enfermos de ELA y de Parkinson

Nacho Martín|Salamanca (EFE).- En tiempos en los que las tradiciones y el compromiso se miran con cierto recelo, el folclorista salmantino Ángel Rufino de Haro, El Mariquelo, no ha fallado a su cita con la usanza y ha ascendido un 31 de octubre más a la Catedral de Salamanca para elevar al cielo esta vez la causa de los enfermos de ELA y Parkinson.


Sumando un nuevo año, alcanzando su 37ª subida, El Mariquelo, con su habitual vestuario de charro con la gaita y el tamboril, ha llegado este martes de nuevo a la Torre de las Campanas la Catedral Nueva de la ciudad en recuerdo del terremoto de Lisboa de 1755.

Un año más, y ya van treinta y siete, el folclorista salmantino Ángel Rufino de Haro, ‘El Mariquelo’, asciende a una de las zonas más altas de la Catedral Nueva de la ciudad, en una tradición que recuerda el terremoto de Lisboa de 1755, que se sintió en Salamanca pero no produjo víctimas. EFE/J.M. García


ELA y Parkinson


El acto, respetado la lluvia después de varios días pasados por agua, ha estado dedicado este 2023 a las personas que luchan contra las enfermedades de esclerosis lateral amiotrófica (ELA) y Parkinson.


Más concretamente, la ascensión de El Mariquelo al monumento charro ha sido dirigida hacia la asociación ELA Castilla y León y la Asociación del Parkinson.


Esta costumbre, recuperada por este folclorista salmantino en 1985, ha sido seguida por un buen número de turistas, así como de miembros de las asociaciones antes mencionadas, colegiales y los propios salmantinos.


Hasta llegar a este momento, Ángel Rufino de Haro hizo su habitual recorrido partiendo del Puente Romano y transitando por la Plaza Mayor, la Plaza del Corrillo y la Rúa hasta llegar a la Catedral, acompañado por varios grupos folclóricos.


Arriesgada ascensión


Puntual con la cita, a las 11.30 horas, El Mariquelo ha iniciado la ascensión por la puerta lateral de la Catedral Nueva, hacia el lugar donde se encuentra la campana llamada María de la O, en la zona más alta, a 200 metros de altura.


Cerca de las 12.00 horas, El Mariquelo ha completado su misión tras subir los cerca de 300 escalones que hay hasta la zona más alta de la Catedral.


Allí, ha tenido unas palabras rememorando el terremoto y la historia de su familia, que cuidaba el templo salmantino y que comenzó tras la catástrofe a subir hasta lo más alto para hacer sonar las campanas como símbolo de agradecimiento.


Retomar la tradición


Años después, y tras un tiempo en el que se rompió la tradición, en 1985 el folclorista salmantino la retomó y, tras adoptar el papel de heredero de los Mariquelo, comenzó a subir hasta la veleta de la Catedral, aunque ya en los últimos años se queda en la campana por el mal estado en el que están los últimos metros del hierro exterior de la cúpula del templo.


Junto a la campana María de la O, El Mariquelo ha tocado una charrada y ha leído un mensaje a los salmantinos, centrado en el presente año en el ELA y el Parkinson.


Asimismo, las víctimas y afectados por los conflictos en Ucrania e Israel y Gaza también han tenido hueco en el discurso del salmantino.


El culmen de la cita, como no puede ser de otra manera, ha sido hacer sonar una nueva charrada y soltar a las palomas mensajeras. EFE