Vista de la crecida del río Tormes a su paso por Salamanca. EFE/JM García

Alarmante crecida del río Adaja en Ávila, del Tormes en Salamanca y del Zapardiel en Medina del Campo

Valladolid/Segovia (EFE).- La alerta por nieve ha dejado paso en Castilla y León al riesgo de inundaciones por el desbordamiento de ríos como ha sido el caso, este sábado, del Zapardiel a su paso por la Medina del Campo (Valladolid), y la alarmante crecida del Adaja en las inmediaciones de Ávila y del Tormes junto a la capital salmantina.


El cauce del río Zapardiel ha superado los 2,30 metros de altura en los puentes de Aguacaballos y San Miguel, en el centro histórico de Medina del campo, donde la adecuada canalización impide de momento un desbordamiento que sí se ha producido en otros lugares del municipio.

El Zapardiel se desboca


Calles, cocheras, naves y algunas casas han sufrido daños desde las cinco horas de esta mañana en que el río comenzó a rebosar en su parte más baja, ha informado el alcalde de la villa, Guzmán Gómez, y al tendencia es ascendente con 25 metros cúbicos por segundo.


Además del Zapardiel, también crecido a su paso por Rueda, otros ríos de la provincia de Valladolid han comenzado a desbordarse como el Esgueva en Olmos; el Trabancos en Fresno el Viejo y en Castrejón; así como el Duero, el Adaja y el Cega que en diversos términos municipales han anegado fincas de ganado y de labor, además de viviendas agrícolas pero sin daños para las personas.


No obstante, a excepción del Zapardiel, el resto de los caudales se mantienen estables y en tendencia descendente, según fuentes de la delegación territorial.


El Adaja en Ávila …


La crecida del Adaja a su paso por Ávila ha obligado a precintar el acceso al parque El Soto, uno de las principales área verdes y recreativas de la capital, que ha quedado inundado e inutilizado la celebración en este escenario, prevista este domingo, del XVI Cross Ciudad de Ávila.


Por otra parte, la carretera AV-P-120, a la altura de la localidad de San Pascual, al norte de la provincia, permanece cortada por inundaciones, según ha informado la Dirección General de Tráfico (DGT).

Vista de la crecida del río Tormes a su paso por Salamanca. EFE/JM García


…y el Tormes en Salamanca


Las grandes crecidas de los ríos Tormes y Almar mantienen en alerta a la provincia de Salamanca, ambas con aviso amarillo en la última actualización de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD).


Tres coches se han quedado atrapados este sábado por la crecida del caudal del Tormes en el puente de Sánchez Fabrés en Salamanca capital, y han necesitado la intervención de Bomberos y Policía Local para ser retirados, según han indicado a EFE fuentes locales.


El gran aumento del caudal del río Tormes se ha hecho evidente en los bajos del Puente Romano que han quedado inundados, cuando normalmente se puede pasar por allí, una estampa inusual que ha motivado a los salmantinos a acudir a contemplarla y tomar fotografías.


El Ayuntamiento de Salamanca ha decidido cerrar al público, de forma preventiva, el parque de Huerta Otea ante la crecida del Tormes, que sigue en tendencia ascendente, mientras que la del Almar, en Alconada, es decreciente, según los últimos datos de la CHD.


Segovia en alerta


La Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) mantiene el nivel rojo de alerta en los ríos Duratón a su paso por Sepúlveda y a la salida del embalse de Las Vencías, y también en el Eresma junto a las localidades de Bernardos y Coca.


Se ha desactivado la alerta roja por inundaciones en la capital puesto que la tendencia descendente del río Eresma a su paso por Segovia así lo permite. Además, también se encuentran en alerta naranja, aunque con tendencia descendente, los ríos Riaza y Voltoya.


La mejoría de las condiciones climatológicas favorecerá también la apertura de las carreteras cortadas por las inundaciones en la provincia, aunque a primera hora de este sábado la Diputación de Segovia informa de que todavía quedaban seis vías de la red provincial cortadas por las balsas de agua acumuladas. EFE