València (EFE).- El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha afirmado este lunes que con la convocatoria de las elecciones autonómicas para el 28 de mayo se pone “punto y seguido” a una legislatura “excepcional” y “única” para el autogobierno de los valencianos, en la que pese a las “enormes dificultades” se ha avanzado.
Puig se ha pronunciado así en el Salón de Corts del Palau de la Generalitat tras firmar el decreto que disuelve Les Corts elegidas en 2019, convoca las elecciones autonómicas y fija la constitución del Parlamento valenciano de la undécima legislatura el 26 de junio, fecha en que se cumplen 60 años del discurso de Kennedy junto al muro de Berlín.
“Esta es una comunidad que no quiere retroceder, una comunidad que quiere seguir adelante”, ha indicado Puig, quien ha considerado que en los últimos ocho años se ha “avanzado en soluciones donde había disfunciones” y aunque ahora “no todo es perfecto, ni mucho menos”, se está en condición de conseguir “nuevos hitos”.
La legislatura de la pandemia, pero no sólo
Flanqueado por todos los miembros del Consell, a quienes ha dado las gracias por su labor, ha rememorado que la décima legislatura comenzó con la Dana en la Vega Baja y la borrasca Gloria, para dar paso a la “adversa” pandemia de coronavirus, que acabó con la vida de 10.451 valencianos, y luego a una guerra en Europa que ha impactado en la economía.
Pese a “las insuficiencias, las dificultades y todas las debilidades”, Puig ha reivindicado que la Comunitat Valenciana ha avanzado en tres ámbitos “fundamentales”, como son más trabajo desde un crecimiento económico sostenible, mayor cohesión social desde el principio de la justicia social, y un nuevo mapa de oportunidades.
Puig ha enumerado logros como la reforma fiscal, la llegada de Volkswagen, el aumento de las plantillas educativas y sanitarias, el “clima permanente” de acuerdos y diálogo social frente el “ruido” de otros territorios, la aprobación de 30 leyes, los 3.600 millones de euros llegados de fondos europeos o el haber superado “el paradigma de la corrupción”.
Reivindicaciones pendientes
En el capítulo de asuntos pendientes, el president ha indicado algunos que no dependen solo de los valencianos, como una financiación autonómica justa, que se va a seguir reivindicando con unidad, igual que se va a seguir reclamando tener en España el papel que le corresponde la Comunitat, desde una visión federalista.
Exigir “agua para siempre”, con “determinación, diálogo y soluciones” y sin confrontaciones “estériles” que solo traen “barro”; reclamar como “irrenunciable” el trasvase Tajo-Segura; y continuar exigiendo las inversiones del Estado que corresponden a la Comunitat y que sean equilibradas entre las tres provincias son otros compromisos.
No todo está bien
“Hay por tanto insuficiencias; ni todo lo hemos hecho bien, ni todo está bien”, ha admitido Puig, quien no obstante ha defendido que todos los indicadores económicos y sociales de la Comunitat Valenciana reflejan que este territorio está mejor que en 2015 y que se está avanzando desde la inclusión.
Todo ello se ha hecho en una legislatura “excepcional, manteniendo la estabilidad, forjando acuerdos y priorizando las soluciones”, ha manifestado el president, quien ha indicado que a partir de ahora corresponde dar la voz a la ciudadanía para que se pronuncie en las urnas sobre el futuro.
Puig ha tenido también palabras de agradecimiento para cada valenciano y valenciana por su paciencia, su esfuerzo cotidiano y la responsabilidad en los momentos más difíciles, y les ha pedido disculpas por los “errores” que se hayan podido cometer y por las “insuficiencias de cada día”.
El president ha reivindicado que se ha agotado la legislatura para “atender la gestión al cien por cien”, para aprovechar este momento “inédito de transformaciones y oportunidades”, para intensificar el respaldo a las familias, y para poner “la máxima vitalidad” a una gestión que seguirá vigente hasta que el Consell pase a estar en funciones.
Finalmente, ha afirmado que “la vía valenciana”, la de la convivencia basada en el respeto, la del acuerdo fundamentado en el diálogo y la unión de los valencianos, está dando resultados y “lo mejor está por venir”, pues esta es una “década decisiva”.
