València, 14 sep (EFE).- La dirección del Medusa Festival de Cullera (Valencia) espera ya un último informe pericial y la resolución de la investigación judicial abierta tras la tragedia causada por fenómenos meteorológicos y que causó una muerte y docenas de heridos que avalen que cumplía con las medidas de seguridad para este tipo de acontecimientos.
En un comunicado, la dirección del festival responde así al informe del que ya dispone por parte de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), según el cual el desplome vertical de un masa de aire contra el suelo y posteriores ráfagas horizontales de viento de entre 70 y 100 km/h, junto a un ascenso de la temperatura de unos 10 grados y la caída de la humedad en un 40 %, fueron algunos de los fenómenos meteorológicos registrados esa madrugada del 13 de agosto.
Así lo explicó este miércoles a Efe el responsable de Climatología de Aemet en la Comunitat Valenciana, José Ángel Núñez, que tras ese incidente fue nombrado perito meteorológico y ha remitido ya al Juzgado de Instrucción número 4 de Sueca (Valencia) un informe con las circunstancias meteorológicas que se produjeron esa noche.
Según Núñez, lo que ocurrió fue un “reventón cálido” que se produjo en la fase final de las tormentas que desde la una de la madrugada penetraron por el interior de las provincias de Alicante, Valencia y región de Murcia y, aunque de forma generalizada iban produciendo subidas de temperaturas y vientos generalizados, hubo lugares concretos donde dejaron rachas muy fuertes.
“Junto a este (informe de Núñez) y el informe de inspección ocular emitido por la Guardia Civil que apunta que Medusa Festival cumple con toda la normativa contemplada en las leyes y aplicables a la celebración de este tipo de eventos, quedamos a la espera de un último informe pericial y la resolución de la investigación judicial que se está llevando a cabo por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Sueca”, añade la dirección del festival.
“En este momento sigue en marcha una investigación judicial que tiene como fin clarificar lo sucedido y dar respuesta a los perjudicados, entre los que se encuentra la organización de Medusa festival, además de depurar las responsabilidades pertinentes si las hubiere -añade-. La información de la que disponemos es reducida ya que es imprescindible no interferir en la misma con el fin de facilitar el trabajo a los profesionales que llevan a cabo la investigación”.
Del informe del perito “también se extrae que los avisos de fenómenos adversos para la zona geográfica donde se celebraba Medusa Festival emitidos por AEMET el viernes 12 de agosto de 2022, y válidos para el sábado 13 de agosto de 2022, fueron únicamente por altas temperaturas”, según la dirección.
“El ámbito geográfico donde se preveían tormentas con probabilidad de granizo y rachas fuertes o muy fuertes de viento era en el interior norte y sur de Castellón y el interior norte y sur de Valencia -remarca-. Con esto, la organización de Medusa Festival no tuvo constancia de alertas meteorológicas que indicasen la posibilidad de sufrir un fenómeno meteorológico adverso como el que se produjo, y que supusiera un riesgo para la integridad física de asistentes, artistas y trabajadores congregados en Medusa Festival”.
Como consecuencia de ese “reventón cálido”, varias estructuras del recinto del festival cayeron sobre algunos asistentes -en el Medusa se habían congregado unas 40.000 personas en esos momentos- y causaron la muerte a un joven de 21 años y heridas a al menos una treintena de personas más, pues se calcula que muchos afectados abandonaron la zona en vehículos particulares.