La actriz y humorista, Silvia Abril, protagoniza 'Las Asambleístas (Las que tropiezan)' en el Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida. EFE/ Jero Morales

Silvia Abril, protagonista de ‘Las Asambleístas’ en Mérida: la comedia como bálsamo ante el patriarcado

Salvador Vallejo |

Mérida (EFE).- La actriz y humorista Silvia Abril, protagonista de ‘Las Asambleístas (Las que tropiezan)’ en el Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida, lamenta que, como refleja el texto original de Aristófanes, las mujeres sigan “sometidas” a un patriarcado ante el que defiende la comedia como bálsamo, pues “o te ríes de todo esto para sobrevivir, o no hay escapatoria”.

A sus 52 años, la catalana confiesa sentirse como una “niña” al seguir muy activa en su trabajo que entiende no como una obligación sino como uno de los “placeres” que “más feliz la hacen”, por lo que continuará actuando mientras el cuerpo se lo permita, asegura en una entrevista con Efe.

Para Abril, su profesión es “jugar a vivir la vida de otras mujeres”, lo que le “facilita” seguir sacando la energía para gestionar una intensa vida profesional que en 2023 la ha llevado a rodar la serie de Netflix ‘Todas las veces que nos enamoramos’ y programas televisivos como ‘Tu cara me suena’, entre otros proyectos.

Silvia Abril encarna a Práxagora en ‘Las Asambleístas’

Ahora, la actriz regresa al Festival de Mérida para encarnar a Práxagora en ‘Las Asambleístas’, una obra dirigida por José Troncoso que, según vaticina la propia Abril, tendrá continuidad y sumará nuevas representaciones a las ya programadas puesto que las mujeres que conforman este montaje “nos hemos sentido muy cómodas y queremos hacer gira”.

La actriz y humorista, Silvia Abril, protagoniza 'Las Asambleístas (Las que tropiezan)' en el Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida.
La actriz y humorista, Silvia Abril, protagoniza ‘Las Asambleístas (Las que tropiezan)’ en el Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida. EFE/ Jero Morales

En cuanto a su regreso veinte años después de su primera actuación en el Teatro Romano, “hay que ser como las piedras para no emocionarse”, bromea la humorista que considera este enclave la “cuna, matriz y madre” de las representaciones antiguas.

“Un sueño hecho realidad” del que es “muy consciente”, motivo por el cuál, al hablar de ello, se le “eriza” el bello, manifiesta.

Junto a ‘Praxágora’, ‘Geométrica’, ‘Serviciala’, ‘Lanzada’, ‘Némesis’ y ‘Lacia’ celebrarán en el histórico escenario emeritense una asamblea de la que harán partícipe al público que, seguro, votará a favor de las asambleístas, afirma entre risas Abril.

Abril se identifica con su personaje, cabecilla de la asamblea

“Praxágora habla mucho de mí”, explica la actriz, quien se considera una mujer con vitalidad, energía y liderazgo natural, al igual que su personaje, cabecilla de un periplo para “llegar a la asamblea donde mandan los hombres e intentar de manera camuflada cambiar las leyes”.

“Arrastrar” a cinco mujeres cuyas vivencias “también hablan de mí, me llena de emoción y de fuerza”, declara Abril, agradecida por la oportunidad de interpretar a Praxágora, “un regalo de personaje” que “ahora vive en mí”.

La actriz y humorista, Silvia Abril, protagoniza 'Las Asambleístas (Las que tropiezan)' en el Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida.
La actriz y humorista, Silvia Abril, protagoniza ‘Las Asambleístas (Las que tropiezan)’ en el Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida. EFE/ Jero Morales

“Por desgracia”, lamenta la actriz, el texto de Aristófanes, una comedia escrita hace 2.400 años “para reivindicar un poco el lugar de las mujeres”, tiene una vigencia “que no debería”, ya que dos milenios después la situación está “prácticamente en el mismo lugar”, critica.

Una situación que el reparto de ‘Las Asambleístas’ denunciará como mejor sabe, provocando la risa pues, como señala la humorista rescatando una frase de su marido, el cómico Andreu Buenafuente, “reír es la única salida” en muchas ocasiones.

Así, “Las que tropiezan”, lideradas por Abril, tratarán de aportar “luz a esta reivindicación que hace demasiado que persiste” usando la comedia como “vaselina para colarnos en temas importantes” y, sobre todo, “sobrevivir”.