Museo de Arte Antiguo y Nuevo (MONA). EPA/Rob Blakers

Un museo australiano cuelga cuadros de Picasso en baños para mujeres para sortear la ley

Sídney (Australia) (EFE).- Dos cuadros de pintor español Pablo Picasso fueron instalados en el interior de baños para mujeres del Museo de Arte Antiguo y Nuevo (MONA), en el sur de Australia, tras una sentencia judicial que calificó de discriminatorio que el recinto contara con una exposición exclusiva para mujeres.

“Nunca antes habíamos tenido baños femeninos en MONA, todos eran unisex. Pero después del cierre de ‘Ladies Lounge’ (Sala de Mujeres) gracias a una demanda iniciada por un hombre, simplemente no sabía qué hacer con todos esos Picassos”, apuntó Kirsha Kaechele, la comisaria de la exposición, en la red social Instagram.

Decisión tras el cierre de ‘Ladies Lounge’

El MONA, ubicado en la ciudad de Hobart, decidió cerrar de manera temporal ‘Ladies Lounge’ tras la sentencia dictada en abril por un tribunal administrativo de Tasmania que encontró discriminatorio que el museo vetara el acceso a la sala a los hombres.
En su denuncia, un hombre, identificado como Jason Lau, alegó que en 2023 el museo le impidió el acceso a la instalación a pesar de haber pagado la entrada completa al recinto.

Kaechele, quien acompañó su publicación con un vídeo y fotos de los servicios para mujeres, ya avanzó durante una entrevista publicada en mayo en el blog del museo la posibilidad de convertir la exhibición ‘Ladies Lounge’, alojada en el MONA desde 2020, en un baño para mujeres.

Los cuadros de Picasso colgados

El cuadro ‘Mujer acostada en el sofá’ (1932, de estilo cubista) se encuentra sobre un lavabo, mientras que una versión de Picasso del cuadro ‘El almuerzo sobre la hierba’ (1961) se ubica al lado de un retrete, según se aprecia en las imágenes.

“Volveremos a abrir la sala como una iglesia, colegio, establecimiento de lujo o instalación (…) mientras tanto, ¡disfrutad mujeres!”, remarcó la artista estadounidense en la red social.

Con ‘Ladies Lounge’, Kaechele buscaba reflejar “la segregación histórica de género” en Australia, un país donde hasta 1965 solo los hombres tenían derecho a entrar a un bar a beber o donde existen clubs de caballeros de los que las mujeres no pueden formar parte.