Entrada al Palacio de Marivent, este miércoles. EFE/Cati Cladera

Podemos exige el uso público del palacio de Marivent, “parte del expolio franquista”

Palma (EFE).- Podemos reclama el uso público del palacio de Marivent de Palma, residencia veraniega de los reyes, que considera “parte del expolio franquista” y quiere convertir en un museo de arte abierto a la ciudadanía.

La candidata del partido morado a la presidencia del Govern balear, Antònia Jover, acompañada por el secretario de Horizonte Republicano, Rafa Mayoral, y otros cargos de la organización han reclamado este miércoles a las puertas del palacio el fin de la “omertá que rodea la cesión de Marivent”.

El pintor y mecenas egipcio de origen griego Juan de Saridakis construyó de 1923 a 1925 su residencia costera en Palma, y su viuda, Anunciación Marconi, donó en 1966 los jardines, el edificio y la colección de arte que contenía a la Diputación de Baleares, con la condición de convertirlo en museo y centro de creación.

Podemos explica en un comunicado que en 1973, hace medio siglo, se cedió el uso del palacio para disfrute privado a los entonces príncipes de España, Juan Carlos y Sofía, incumpliendo el acuerdo suscrito con la familia, lo que derivó en un proceso judicial por el que los herederos de Saridakis recuperaron las piezas artísticas y el mobiliario cedidos inicialmente al pueblo balear.

Reclaman que la documentación judicial sea de acceso abierto

El partido republicano quiere tener acceso a los autos de la causa que supuso esa pérdida para la comunidad autónoma “por haber hecho un uso privativo del espacio por parte de la familia real”.

Jover considera que sus socios del Govern que preside la socialista Francina Armengol, PSOE y Més per Mallorca, tienen que empujar en esa dirección. “Con cincuenta años de oscurantismo, basta”, ha remarcado.

Mayoral ha insistido en que la documentación judicial ha de ser de acceso abierto para que la sociedad conozca las causas de “una grandísima pérdida de patrimonio artístico de propiedad pública”.

El diputado ha comparado el palacio de Marivent con el Pazo de Meirás, que fue residencia de la familia Franco y ha sido recuperado como propiedad pública: “En ambos casos se produce la expropiación por medios aparentemente legales de un bien público”.

Un juzgado de primera instancia primero, la Audiencia Provincial de Baleares después y el Tribunal Supremo finalmente en junio de 1988 establecieron que los bienes muebles de Marivent debían devolverse al heredero de Saridakis porque se incumplía el acuerdo de cesión según el cual el edificio debía albergar un museo y un centro de formación de artistas.

La reclamación del heredero solo se refería a los muebles, colecciones de arte, útiles de grabado y pintura, libros y ajuar cedidos a la Diputación Provincial, pero no al palacio.

La sentencia del Tribunal Supremo aclaraba que este heredero, José Carlos Hermann Marconi, renunció en escritura pública en 1978 al derecho de reversión del palacio mientras fuera utilizado por el jefe del Estado o su sucesor y herederos como residencia durante su visita a las islas.

Tras la disolución de la Diputación Provincial, los derechos sobre la cesión de la viuda de Saridakis pasaron a la Comunidad Autónoma de Baleares, que fue la institución que pleiteó sin éxito para intentar conservar los muebles y las obras de arte de Marivent.