Puerto de Barbate. EFE/ David Arjona

La Fiscalía cuestionó el fin “sorpresivo” del órgano de coordinación contra el narco en Cádiz

Madrid (EFE).- El desmantelamiento del Órgano de Coordinación contra el Narcotráfico (OCON-SUR), puesto en marcha en 2018 en la zona del Campo de Gibraltar en Cádiz, redujo a la mitad las incautaciones de hachís, según consta en la Memoria de la Fiscalía General del Estado correspondiente al ejercicio de 2022.

La fiscal delegada antidroga para Andalucía, Ana Villagómez, fue quien alertó de la “notable reducción” de la incautaciones de hachís con respecto a 2021. Y lo relacionó con la desaparición en 2022 de dicho operativo especial que se produjo, según sus palabras, “sorpresivamente y sin comunicación previa a la Fiscalía de Andalucía. Ni a la Fiscalía Especial, ni a los órganos judiciales”.

Aviso de la Fiscalía de Cádiz en su Memoria de 2022

Aún así, según esta fiscal añadió en la Memoria de la Fiscalía, en 2022 la provincia de Cádiz continuó siendo en la que más droga intervinieron las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. En concreto, un 50 % del hachís y un 78 % de cocaína del total aprehendido en esa comunidad autónoma.

La disminución en las intervenciones de alijos de hachís supuso a su vez una reducción de procedimientos penales en la provincia de Cádiz. Lo que Villagómez atribuyó asimismo “a una menor presión policial”.

La fiscal delegada antidroga para Andalucía, Ana Villagómez
La Fiscalía cuestionó el fin “sorpresivo” del órgano de coordinación contra el narco en Cádiz. La fiscal delegada antidroga para Andalucía, Ana Villagómez. EFE/Román Ríos

Reajuste de efectivos paulatino

El reajuste de los 150 efectivos del OCON-SUR en los Equipos de Delincuencia Organizada y Antridroga (EDOA) se produjo paulatinamente. Y a finales de 2022 aún no había finalizado el proceso, según ella misma relató en dicha Memoria.

En sus cuatro años de existencia, el OCON-SUR consiguió desarticular a los principales clanes de la droga de la zona con la detención de más de 10.000 personas. Y la incautación de más de 1.400 toneladas de droga.

En la Memoria, la fiscal delegada de Andalucía puso también el foco en el “estancamiento de algunas causas relevantes de blanqueo” en el Puerto de Santamaría. También en Barbate o en Chiclana por “la sobrecarga de los juzgados y de los cambios de funcionarios y jueces titulares”.

Una situación que implica, indicó, que cada “nuevo instructor deba conocer y estudiar causas complejas que llevan años de investigando”.

Agentes de la Guardia Civil trasladan a los juzgados de Barbate (Cádiz) a uno de los ocho detenidos por la muerte de dos guardias civiles a los que arrollaron con una narcolancha en la localidad gaditana de Barbate el pasado viernes
La Fiscalía cuestionó el fin “sorpresivo” del órgano de coordinación contra el narco en Cádiz. Agentes de la Guardia Civil trasladan a los juzgados de Barbate (Cádiz) a uno de los ocho detenidos. EFE/Román Ríos.

Por su parte, la fiscal jefe Antidroga de la Audiencia Nacional, Rosa Ana Morán, destacó en esta misma Memoria, la primera en la que intervino tras su nombramiento para ese cargo, que el sistema de organización en relación con los fiscales delegados era anacrónico 35 años después de su puesta en marcha.

Por ello planteó “una revisión de la relación de la Fiscalía especial con sus delegaciones territoriales de forma que se pudiera también coordinar y supervisar realmente y, sobre todo, prestar desde la Fiscalía central el apoyo, asesoramiento y ayuda” necesarios, lo que requeriría “una redimensión de la actual plantilla”.

Los agentes de Vigilancia Aduanera avisaron del temor por su integridad frente a los narcos

Mientras tanto, agentes de Vigilancia Aduanera presentaron el pasado 13 de noviembre un escrito en la Delegación Especial de la Agencia Tributaria de Andalucía en el que ya manifestaban el temor por su integridad por las embarcaciones con las que trabajan. Y reclamaban “el refuerzo de los medios frente al narcotráfico”.

Este escrito, en el que se advertía de la precariedad laboral en la que Vigilancia Aduanera desarrolla su labor, se ha conocido este lunes por la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) tras la muerte el viernes pasado de dos guardias civiles, arrollados por una narcolancha en Barbate (Cádiz).

La Fénix se incorporaron para reforzar a las patrulleras

narcolanchas Barbate
La Fiscalía cuestionó el fin “sorpresivo” del órgano de coordinación contra el narco en Cádiz. El Ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska (c) a su llegada a la comandancia de la Guardia Civil este viernes. EFE/Román Ríos.

Los miembros de Vigilancia Aduanera firmantes del escrito explican que entre 2018 y 2019 se empezaron a incorporar a la flota un tipo de semirrígidas cabinadas de 10 y 11 metros de eslora con tres motores fueraborda, que se denominan Fénix II, III, IV y V, cuyas funciones en la base marítima de Algeciras (Cádiz) serían reforzar la labor del patrullero tradicional de casco de fibra reforzada Rodman 55.

Añaden que “como represores del contrabando y de delitos de narcotráfico en las costas andaluzas” llevan muchos años “siendo la punta de lanza en la lucha contra esta lacra que inunda nuestra sociedad”.

Cada vez más narcolanchas y más potentes

“La costa de Andalucía se ha convertido en una gran empresa logística y de distribución de hachís. Las narcolanchas cada vez son más numerosas, más grandes y más potentes. Y cada vez es más normal en las patrullas rutinarias encontrar grupos de tres, cuatro o más juntas. Unas con hachís, otras con petacas de gasolina y otras de apoyo vacías”, agregan.

Señalan que “una embarcación tipo Fénix tiene menor eslora y menor porte que la mayoría de las narcolanchas”. Por lo que aunque pueden “competir en velocidad” en relación a las características estructurales de ambas embarcaciones están “en inferioridad”.

Comentan que “en un principio el uso de las embarcaciones Fénix fue definido como puramente asistencial. Auxiliares y de complemento de las Rodman 55. Pero la precariedad por la que atraviesa la flota de Andalucía hace que desde hace años están siendo usadas como un patrullero más saliendo en solitario”.

Mientras, “las organizaciones de narcotraficantes y sus miembros son cada vez más violentos. Por lo que no debemos subestimar los peligros a los que están expuestos los funcionarios de Vigilancia Aduanera de Andalucía”, recalcan.

CSIF ha anunciado que se compromete a “denunciar esta situación ante todas las administraciones, foros y medios de comunicación”.