Zaragoza/Córdoba (EFE).- En España llegó a haber cerca de 6.000 fosas con víctimas de la guerra civil y el franquismo, pero solo unas 1.500 han sido exhumadas, unas cifras que reflejan el dolor de miles de familias que, 50 años después de la muerte del dictador Francisco Franco, no han podido recuperar aún los restos de sus seres queridos.
En las labores de exhumación de la fosa común del cementerio de Ejea de los Caballeros (Zaragoza), una de las más grandes de Aragón, están apareciendo no solamente huesos, sino también restos de zapatos, monedas, llaves, botones y otro tipo de objetos cotidianos, como las pequeñas tijeras de una costurera.
Este lugar esconde los restos de al menos 163 personas que fueron asesinadas junto a las tapias del camposanto en los primeros meses de la guerra civil por parte de los sublevados.
Abrazos tardíos
Los cuerpos fueron «arrojados como alimañas» a una zanja, no a una tumba con dignidad, lamenta en declaraciones a EFE Mariano Malón Pueyo, sobrino de Pío Pueyo, concejal socialista del Ayuntamiento de Uncastillo (Zaragoza) que fue asesinado en las primeras semanas del alzamiento.

El cadáver de su tío aún no ha sido localizado, pero Mariano vive la exhumación de los cuerpos de otras víctimas con una inmensa alegría.
«Cuando los encontramos, yo puedo sentir hasta los abrazos que no han podido dar a sus hijos y a sus nietos», confiesa emocionado.
Las excavaciones comenzaron a finales de octubre con financiación del ayuntamiento, del Ministerio de Política Territorial y Memoria Democrática a través de la Federación Española de Municipios y Provincias y de la Diputación de Zaragoza, y está a punto de finalizar su primer fase.
Ya han salido a la luz 25 cuerpos, tratados con exquisita delicadeza por un equipo de nueve arqueólogos y antropólogos.

Desgraciadamente, muchos no podrán ser identificados porque ha pasado mucho tiempo, reconoce el secretario de la Asociación de Recuperación de la Memoria Histórica Batallón Cinco Villas, Javier Sumelzo.
Más de 10.000 cuerpos susceptibles de exhumar
Las exhumaciones científicas de fosas comunes son relativamente recientes en España, ya que fue en el año 2000 cuando tuvo lugar la primera identificación genética de un desaparecido de la guerra civil, concretamente en la localidad leonesa de Priaranza del Bierzo.
En 2025, al cumplirse 50 años de la muerte de Franco, sigue habiendo muchas exhumaciones pendientes, pero los cálculos no son fáciles.
La Secretaría de Estado de Memoria Democrática acaba de elaborar junto con RTVE el primer mapa audiovisual de las fosas comunes y da una cifra de todas las que llegó a haber relacionadas con la guerra civil y el franquismo: 5.848, de las cuales la propia página web señala que casi 1.500 han sido exhumadas.
Sin embargo, el secretario de Estado de Memoria Democrática, Fernando Martínez, ha aclarado a EFE que esta cifra no significa que siga habiendo en torno a 6.000 fosas comunes en España, ya que alrededor de 500 fueron trasladadas al Valle de Cuelgamuros (antiguo valle de los Caídos) y otras han desaparecido.

Por su parte, el ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, informó recientemente de la recuperación de 8.941 cuerpos desde 2019, pero solo 70 han sido identificados y entregados a sus familiares.
La Sociedad de Ciencias Aranzadi estimó que en el año 2019 había alrededor de 20.000 cadáveres susceptibles de exhumar, por lo que quedarían algo más de 10.000.
Para intentar seguir avanzando en este ámbito está en marcha el II Plan Cuatrienal de Exhumaciones 2025-2028, al que el Gobierno acaba de destinar 2,4 millones de euros. Precisamente, el ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, ha confiado este lunes en que en 2027 se hayan podido exhumar los restos de prácticamente todas las víctimas del franquismo.
Fosas comunes en cementerios y tubos volcánicos
Las comunidades autónomas con más fosas comunes son Aragón, Cataluña, Castilla y León y Andalucía, entre las que destaca la del barranco de Víznar, en Granada, donde los cálculos hablan de centenares de víctimas y existe la posibilidad de que entre ellas esté el poeta Federico García Lorca.

En Córdoba, los profesionales que trabajan en las exhumaciones del cementerio de La Salud están centrados en un sector donde podría haber entre 340 y 350 cuerpos, dentro del millar de víctimas que pudieron ser inhumadas en el recinto entre 1936 y 1946, según ha explicado a EFE el historiador Juan Francisco Coto, miembro del equipo.
Estas fosas se vinculan tanto a las ejecuciones de los primeros meses de la guerra civil como a las muertes derivadas del hambre y las enfermedades en prisión, especialmente durante 1941, año de una grave epidemia de tifus en la ciudad.
Hasta el momento, los técnicos han recuperado en torno a 180 restos humanos, la mitad de los que aproximadamente se estiman que hay en esa zona.
Por otra parte, unos recientes trabajos de exhumación han sacado a la luz los restos de 72 personas que fueron represaliadas en la localidad sevillana de Cañada Rosal en 1936.
Los restos están en dos fosas dentro de un parque de la localidad, donde estaba ubicado el antiguo cementerio.
La mayoría de las fosas, dentro de cementerios o tapias
La mayoría de las fosas comunes de Andalucía y del conjunto de España están dentro de cementerios o junto a sus tapias, aunque también hay víctimas que fueron enterradas en pozos, minas, cuevas y tubos volcánicos, como la Sima de Jinámar, en Gran Canaria.
Los trabajos de exhumación en las fosas comunes continúan en la actualidad con un objetivo común: desenterrar la memoria de las víctimas para sanar el dolor de sus seres queridos.