Las obras de la ciudad inteligente “Elysium City”, que va a construir en Castilblanco (Badajoz), comenzarán el próximo 19 de mayo con el inicio de los trabajos de movimiento de tierras, que correrán a cargo de la unión temporal de empresas (UTE) extremeña formada por Gosadex y Aglomerados La Serena.
La actividad comenzará en los terrenos propiedad de la compañía y continuará en el resto de la superficie cuanto se otorgue el acta de ocupación, según ha informado la promotora del proyecto, Castilblanco Elysium Corporation, en un comunicado.
Empresas extremeñas
La promotora ha destacado la importancia de contratar con empresas extremeñas todo lo relativo a la construcción y posterior puesta en marcha de Elysium, ya que será un revulsivo para la economía local.
El proyecto cuenta ya con las autorizaciones ambientales, publicadas en el Diario Oficial de Extremadura (DOE) el pasado mes de enero, y el Ayuntamiento de Castiblanco concedió la licencia de obras el pasado 2 de mayo tras su aprobación en una sesión plenaria municipal.
Este era el último permiso que Elysium City necesitaba para iniciar sus obras y colocar la primera piedra de este proyecto que se convertirá en “la primera ciudad inteligente y sostenible de toda España y de Europa”, según ha subrayado la promotora en un comunicado.
A su juicio, este proyecto es un referente a nivel internacional del nuevo ocio que se está demandado después de la pandemia, por lo que “es un proyecto ilusionante para Extremadura y para España”.
Doce millones de metros cuadrados
Elysium City contará con una superficie de 12 millones de metros cuadrados, 8,3 millones de ellos de suelo urbanizable.
Contempla 20 hectáreas de zonas verdes y una capacidad hotelera de 18.000 plazas, zona residencial, parques temáticos, embarcaderos, una costa navegable de 17 kilómetros de costa, además de instalaciones para la celebración de conciertos.
La puesta en marcha de este proyecto supondrá una inversión de 18.000 millones de euros, según los promotores, que han destacado que no han solicitado ninguna subvención ni ningún tipo de ayuda, ya que es una apuesta “a pleno pulmón” con recursos y avales propios. EFE
