A Coruña, 3 jul (EFE).- Unas 250 personas se han concentrado este lunes frente a la playa de Riazor para guardar un minuto de silencio por Samuel Luiz cuando se cumplen dos años de su asesinato.
Vecinos de la ciudad, miembros de la Corporación municipal y amigas del joven que recibió en una noche de fiesta una paliza que acabó con su vida acudieron a la avenida de Buenos Aires, donde fue asesinado, para hacerle un homenaje y depositar flores como recuerdo.
Ana García, presidenta de ALAS A Coruña, la asociación LGTBI+ que ha convocado esta vigilia, ha asegurado que es un día para “recordar a Samuel” y “seguir pidiendo justicia para este crimen tan brutal”.
Aunque no se procedió a la lectura de un manifiesto, algunos de los presentes han comentado, que esperan que haya “un juicio pronto” y que dos años después es “muy importante” honrar su memoria.
Una vez concluyó el minuto de silencio con un fuerte aplauso y una artista tocó dos canciones, las casi 250 personas que participaron en el homenaje acudieron hasta la avenida de Buenos Aires a dejar flores en el sitio exacto en el que lo mataron.
El caso de Samuel todavía está abierto y a la espera de juicio, en el que habrá jurado popular. De los siete investigados por la Policía Nacional, tres hombres se encuentran en prisión, una chica está en libertad desde el 9 de julio de 2021 y otro detenido, que estuvo un mes en prisión, ahora se encuentra en libertad.
Los dos chicos que eran menores en el momento del crimen fueron condenados a tres años y medio de internamiento en régimen cerrado como autores de un delito de asesinato por su participación en los hechos.
Uno de los asuntos clave que se determinará en el juicio es si se trata de un crimen homófobo, pues en la investigación policial han aparecido indicios relativos a comentarios de algunos de los procesados sobre su odio a los homosexuales.
Esta cuestión ha provocado que Samuel Luiz, que fue auxiliado por los senegaleses Ibrahima Diack y Magatte Ndiaye, que nada pudieron hacer para salvarlo, se haya convertido en un icono de la lucha LGTBI+.
Desde ALAS esperan que el juicio se celebre “más pronto que tarde” y que lo ocurrido con Samuel “no se olvide”.