Palma (EFE).- «Le dije que lo que hizo es una barbaridad, ella lo hizo muy mal. Soy incapaz de entender por qué se comportó como lo hizo», ha reconocido la defensa de una mujer acusada de asesinar a su bebé prematura que fue arrojada a un contenedor de basura en Porto Cristo (Manacor) en noviembre de 2023.
La Audiencia de Palma celebra un juicio con jurado contra la madre de la bebé y su cuñado por asesinato, unos hechos por los que la Fiscalía pide que sean condenados a prisión permanente revisable. La acusación pública también pide la condena de omisión del deber de socorro para la tía de la bebé.
En la sesión de este lunes, la fiscal, que se ha dirigido a los miembros del jurado en sus conclusiones provisionales, ha insistido en que Yolanda, la madre de la bebé fallecida, se puso de mutuo acuerdo con su cuñado para tirar a la recién nacida al contenedor de basura «sin parar un minuto a ver si estaba viva, que lo estaba».
«Todo fue muy rápido, sólo se preocuparon de huir de ese lugar. Ninguno de ellos fue al hospital, que estaba a dos minutos», ha relatado la fiscal sobre la actuación de los acusados cuando ocurrieron los hechos.
Encontrada en un contenedor por una vecina
En esta línea, ha afirmado que la bebé fue localizada en el contenedor porque una vecina llamó. «La bebé llegó caliente al hospital, nació viva», ha reiterado en su intervención.
Por su parte, Miguel Arbona, que defiende a la madre de la víctima, ha alegado que la mujer no es una asesina. «Ha hecho algo censurable, algo que a todos nos repugna, pero no ha hecho lo que el ministerio fiscal dice», ha argumentado.
Además, la letrada que defiende al tío de la bebé ha recordado que los acusados de cometer este delito «tan grave» están en libertad.

La madre del bebé y el hombre que la acompañaba el día de los hechos son los principales acusado en un proceso en el que la Fiscalía acusa también a una tercera persona, la tía de la bebé, por omisión del deber de socorro, con una pena de una multa de 5.400 euros.
Según el escrito de acusación, el 3 de noviembre de 2023 una mujer que se hallaba embarazada de entre 26 y 27 semanas inició espontáneamente el proceso de parto en el interior de un vehículo que conducía su cuñado y en el que también estaba una hermana de la gestante.
Una vez la mujer había dado a luz a la bebé, de común acuerdo con el hombre, la progenitora entregó la niña al encausado para que detuviese el coche y la arrojase a un contenedor de basuras de Porto Cristo.
Los acusados no miraron si la bebé vivía
Los tres acusados no se pararon «ni un minuto» a comprobar si la bebé estaba viva, ha asegurado este lunes la fiscal durante el juicio.
Así se ha dirigido la fiscal Antonia Ruiz a los miembros del jurado en su informe inicial, en el que ha solicitado que la madre de la bebé y el tío de la víctima sean condenados a prisión permanente revisable por matar a la recién nacida, unos hechos que se remontan al 3 de noviembre de 2023. Los acusados declararán en el juicio en último lugar.
En su intervención, la representante pública ha afirmado que cuando la madre, embarazada de unas 26 o 27 semanas, se puso de parto, «lo lógico» habría sido ir al hospital. Sin embargo, esa tarde llamó a su cuñado, que la recogió con el coche, y a una hermana, también acusada por omisión del deber de socorro.

«Tuvo a la bebé en el coche y pararon frente de la casa de otra hermana. Se pusieron de acuerdo para tirarla al contenedor. No se pararon ni un minuto a ver si esa personita estaba viva. Fue todo muy rápido, solo se preocuparon en huir. El hospital estaba a solo dos minutos», ha argumentado la fiscal.
«La mataron porque estaba viva y la tiraron al contenedor», ha aseverado.