Kiev (EFE).- Rusia atacó anoche con al menos seis drones kamikaze Shahed la región de Dinpropetrovsk, a orillas del río Dniéper, que fueron interceptados por las defensas ucranianas y provocaron la muerte de dos civiles al caer los restos sobre el coche en el que viajaban.
Mientras, un total de diez personas han muerto como consecuencia del ataque ruso con misiles de crucero Kalibr ruso que en la madrugada del jueves alcanzó una zona residencial de Leópolis, en el oeste de Ucrania, según las cifras ofrecida por las autoridades.
“Por la noche, el enemigo atacó la región con Shaheds. Seis drones fueron derribados por las defensas”, escribió en su cuenta de Telegram Sergí Lisak, jefe de la Administración Militar de la provincia de Dnipropetrovsk.
Lisak explicó que “los restos” de uno de los drones “cayeron en un coche que circulaba por la autovía”. “Desgraciadamente”, añadió, “dos hombres han muerto”.
Según la Fuerza Aérea ucraniana, sus defensas aéreas derribaron anoche 12 drones Shahed lanzados por Rusia contra el territorio de Ucrania.
Sube a 10 el número de muertos en el ataque ruso contra Leópolis
En el caso de Leópolis, son ya diez las personas que han muerto como consecuencia del ataque ruso con misiles de crucero Kalibr ruso que en la madrugada del jueves alcanzó una zona residencial de la ciudad, en el oeste de Ucrania, según las cifras ofrecida por las autoridades.
“Hemos encontrado diez cuerpos”, escribió en su cuenta de Telegram el alcalde de Leópolis, Andrí Sadoví, que dio por finalizadas las labores de rescate entre los escombros. El último cuerpo encontrado, explicó, es el de una mujer.
Las autoridades ucranianas habían informado el jueves de la muerte de cuatro personas en el ataque. Posteriormente el número de fallecidos subió a nueve.
Rusia lanzó el jueves de madrugada desde submarinos y portaaviones del Mar Negro diez misiles Kalibr contra la ciudad de Leópolis y sus alrededores. Las defensas antiaéreas ucranianas lograron derribar siete de los diez misiles, pero no pudieron evitar la matanza.
Los misiles rusos también dañaron numerosas viviendas e hirieron a decenas de personas.
