Pamplona (EFE).- Una concentración, convocada por la Red Solidaria Contra la Ocupación de Palestina (RESCOP) y la Campaña ‘Fin al Comercio de Armas con Israel’, ha reclamado este martes frente a la Delegación del Gobierno en Navarra la adopción de medidas «reales» contra el estado de Israel.
Los concentrados han portado una pancarta con el lema ‘Embargo de armas ya. Konplizitaterik ez’ y banderas palestinas, y han coreado consignas como ‘No es una guerra, es un genocidio’, ‘Dónde están, no se ven, las sanciones a Israel’, ‘Israel asesina, Europa patrocina’, ‘El pueblo palestino elige su destino’ y ‘Desde el río hasta el mar, Palestina vencerá’.
Un manifiesto contra la violencia de Israel
En la concentración se ha leído un manifiesto en el que los convocantes destacan que, «ante la extrema violencia de Israel, no se puede estar con Palestina solo con palabras».
«Las palabras y las declaraciones no paran un genocidio. Hacen falta hechos concretos y estos son poner fin a toda relación militar, ya que es lo que permite a Israel sostener económicamente y materialmente este genocidio», subrayan.
Una respuesta «insuficiente» del Gobierno
Además, en un comunicado, estos colectivos afirman que el Real Decreto-Ley anunciado por el presidente Pedro Sánchez «constituye una respuesta tardía, limitada e insuficiente».
«Después de más de dos años de inacción y complicidad», indican, el Gobierno español «presenta un paquete de solo nueve medidas que, lejos de representar una respuesta contundente, resultan ser un gesto simbólico que evita enfrentar la impunidad de un gobierno sionista que lleva décadas violando el derecho internacional».
Estos colectivos denuncian que las medidas anunciadas se centran exclusivamente en aspectos relacionados con la venta de armas, «ignorando otros elementos clave como los contratos de seguridad, los componentes tecnológicos de uso militar y las relaciones comerciales con empresas vinculadas a la ocupación y al apartheid israelí».
Ruptura total de relaciones
«Tampoco se contemplan sanciones económicas reales, ni se menciona la suspensión de acuerdos bilaterales, ni la denuncia explícita del sistema de apartheid impuesto por Israel sobre el pueblo palestino», agregan.
A juicio de los convocantes, el Gobierno «solo ha actuado ante la presión creciente de la sociedad civil, que durante meses ha exigido el fin de la complicidad con los crímenes cometidos en Palestina. Sin embargo, esta respuesta llega tarde y carece de la contundencia necesaria».
La situación en Gaza y Cisjordania, explican «requiere de medidas reales: sanciones políticas y económicas inmediatas, ruptura total de relaciones militares y comerciales con Israel, y una firme denuncia del apartheid y la ocupación».
«El genocidio no se detiene con palabras vacías ni con gestos simbólicos. Se detiene con acciones firmes, con voluntad política y con coherencia con el derecho internacional. La pasividad o tibieza ante estos crímenes convierte al Estado español en cómplice», concluyen.
