Toni Hill interviene este jueves junto a los escritores Francisco Bescós y Romy Hausmann en una mesa redonda titulada ‘Desde las tinieblas’.EFE/Jesús Diges.

Toni Hill: “Existe fascinación sobre las personas que son capaces de hacer barbaridades”

Pamplona (EFE).- Una trilogía sobre las investigaciones de un mosso d’esquadra dio el pistoletazo de salida a la trayectoria literaria de Toni Hill (Barcelona, 1966). Los lectores todavía lo encasillan en el género policíaco a pesar de la década que ha transcurrido desde la publicación de su primera novela, aunque él siempre ha escrito, dice, “lo que me da la gana”.

Hill interviene este jueves junto a los escritores Francisco Bescós y Romy Hausmann en una mesa redonda titulada ‘Desde las tinieblas’, en el marco del festival noir Pamplona Negra, y poco antes ha encontrado un hueco para conversar con EFE sobre su experiencia como autor de novela negra y sus reflexiones.

Sobre esas primeras tres novelas, ‘El verano de los juguetes muertos’, ‘Los buenos suicidas’ y ‘Los amantes de Hiroshima’, cuenta que su intención era reflejar la Barcelona de la época, mientras reflexiona que “la ciudad ha cambiado mucho en este tiempo”. “Me gustaría saber cómo han envejecido, pero no lo sé, porque no las he vuelto a leer”, bromea.

Preguntado por si Barcelona es una ciudad que da mucho más juego para una trama de novela negra, Hill lo niega: “En cualquier lugar puede pasar cualquier cosa, aunque es verdad que Barcelona tiene una gran tradición de novela negra ambientada en sus calles, desde Vázquez Montalbán”.

Sin embargo, reconoce que “las grandes ciudades conllevan un cierto grado de anonimato y puedes pasar desapercibido, pero no veo la necesidad de basar la novela ahí”, ha asegurado. Por eso, “puedes ambientar una novela negra en Pamplona perfectamente, sin ningún tipo de problema, o incluso en un pueblecito del Pirineo”.

Hill también ha escrito sobre el suicidio, un tema tabú hasta hace no mucho, pero sobre el que, poco a poco, existe más conciencia. “El suicidio es un tema que me interesa bastante, aunque es verdad que puede resultar un tanto morboso”, reconoce.

Aun así, “encuentro fascinante el aspecto del misterio que lo rodea”, dice. “En una trama policial, cuando alguien es asesinado, al final se resuelve el caso y se descubre quién fue el perpetrador y por qué lo hizo. Pero en el caso del suicidio, siempre queda esa incógnita sobre por qué la persona decidió llevarlo a cabo”, reflexiona.

En ese sentido, “a veces tratamos de encontrar explicaciones, como la pérdida del trabajo o el abandono por parte de la pareja, pero en realidad nunca logramos comprender del todo por qué alguien opta por esa decisión”. “Es algo que desafía nuestro instinto básico de supervivencia, y por eso este tema me resulta sumamente intrigante”, medita.

Toni Hill posa antes de su intervención de este jueves en Pamplona Negra. EFE/Jesús Diges.

Sobre su más reciente novela, ‘El último verdugo’, publicada en 2023, explica que “se trata de un thriller en el que hay un asesino en serie muy peculiar, porque utiliza un garrote vil para matar a sus víctimas”. “Esto nos lleva a épocas oscuras”, apunta.

La novela presenta un psicópata peculiar perseguido por una experta en psicología criminal, explorando cómo nos acercamos a su figura a lo largo de la historia. La novela no tiene un giro sorpresa a lo largo de la investigación, ya que “el asesino aparece desde el principio”.

Hill reflexiona también sobre “esa fascinación que causa sobre nosotros las personas capaces de hacer estas barbaridades”. “Llega un momento en el cual los lectores me dicen que el psicópata no les cae tan mal. No pueden entender por qué en algún momento empatizan con él”, reconoce, aunque “evidentemente, esta gente tiene que ser retirada del mundo”.

“No sé exactamente por qué opté por la literatura negra, supongo que en parte fue porque había leído mucho de ese género”, apunta, aunque reconoce: «Cuando empecé, encontré más sencillo ceñirme al marco de una investigación policial, ya que establece un esquema claro con un cadáver, un investigador y una serie de pistas”.

“La primera novela tuvo éxito, lo que me llevó a continuar en esa línea, aunque algunas de mis obras posteriores se alejan del género policial”, alerta. A pesar de ello, “los lectores me siguen asociando principalmente con la novela negra”, pero eso no hace que se sienta encasillado. “Estoy abierto a experimentar con diferentes estilos en el futuro”, promete.