Santa Cruz de Tenerife, 10 nov (EFE).- El portavoz del Gobierno de Canarias, Julio Pérez, ha señalado este jueves que con el cese de Conrado Domínguez como director del Servicio Canario de la Salud (SCS) “la responsabilidad política” por el caso Mascarillas “está satisfecha”.
Por este motivo, ha indicado Pérez tras la reunión del Consejo de Gobierno, no ve procedente una comisión de investigación en el Parlamento de Canarias, tal y como exigen PP y Coalición Canaria, y menos cuando hay en curso una investigación judicial que además está declarada secreta.
Pérez, que no ve motivos por los que tendría que ser llamado a declarar como exconsejero de Sanidad, tal y como han sugerido desde la oposición, ha aludido también a “una razón política”, que “hay una gran cantidad, más de una decena”, de funcionarios y responsables públicos que tienen la condición de investigados.
Y ha añadido que hoy mismo se publica en prensa informaciones sobre “responsables políticos que van a volver a ser investigados”, en alusión al candidato del PP a la presidencia del Cabildo de Tenerife, Lope Afonso, y por esto “¿deberíamos promover una comisión de investigación?”, ha preguntado.
Julio Pérez ha considerado que las comisiones de investigación parlamentarias “tienen una finalidad, que no es determinar cuáles son los hechos que dan lugar a la inquietud de la opinión pública”, y que lo aconsejable es “esperar a lo que diga el juez antes de sacar conclusiones sobre este asunto”.
Sobre la asunción de la causa por parte de la Fiscalía Europea, el portavoz del ejecutivo canario ha recalcado que los servicios de la comunidad autónoma avalan que en la compra fallida de mascarillas no se vieron afectados fondos europeos, y que, en la práctica, este cambio de órgano instructor no afecta a “los hechos” ni “al motivo de la investigación”. EFE
