Santa Cruz De Tenerife (EFE).- El consejero de Educación, Formación Profesional, Actividad Física y Deportes del Gobierno canario, Poli Suárez, ha achacado su decisión de destinar 4 millones de euros al concierto de la escolarización de dos a tres años a que algunas de las obras para adaptar los centros educativos “han quedado desiertas” en islas como La Gomera, La Palma y Fuerteventura.
Durante la sesión parlamentaria y a una pregunta del diputado del PSOE Marcos Hernández, Suárez ha insistido en la necesidad de “aclarar lo sucedido” con “datos reales y no políticos”.
“Usted y su partido han dicho que todas las obras estaban licitadas y adjudicadas. ¿Están licitadas las obras de La Gomera? Quedaron desiertas. ¿La Palma? Desierto el concurso. ¿Está licitado Antigua? Ni siquiera ha salido a concurso”, ha esgrimido el consejero.
Así, el diputado socialista ha dicho que su grupo “no está sorprendido” con la medida y la ha calificado de “previsible”.
“Lo que no esperábamos es que fuesen tan rápidos, ni que cabalgasen sobre falacias fácilmente desmontables”, ha señalado Hernández, que ha defendido que el anterior Gobierno, del PSOE, NC, Podemos y ASG, puso en marcha el curso pasado un ciclo de la educación de 0 a 3 años “sin sobresaltos”.
Para este nuevo curso, ha añadido, se licitaron obras de adaptación, suministros y se publicó el nombramiento de los maestros, “pero llegó el verano azul, que unido a la poca voluntad política ha culminado con la privatización”, ha concluido Marcos Hernández.
NIÑOS CON CÁNCER
Por otra parte, y durante una pregunta del parlamentario de Coalición Canaria Jonathan Felipe, el consejero de Educación se ha comprometido a estudiar las propuestas de la Fundación Canaria Pequeño Valiente relativas a la implantación de protocolos para facilitar la vida de niños con cáncer en los centros educativos de las islas.
“Vamos a trabajar de su mano para marcar los protocolos necesarios en los centros educativos de Canarias para que nadie sea diferente a otro. Es importante la accesibilidad, tratarlos de la misma manera y que puedan estar con sus amigos y compañeros de toda la vida sin necesidad de desplazarse”, ha agregado Suárez.
En este sentido, Jonathan Felipe ha demandado que los menores con cáncer puedan acceder a centros escolares adaptados y no se vean obligados abandonar sus centros escolares habituales, con las “secuelas físicas y psíquicas” que ello conlleva, ha concluido. EFE
