Barcelona, (EFE).- El Ayuntamiento de Badalona (Barcelona) quiere desalojar un asentamiento que está ocupado de forma ilegal por unas 500 personas desde el 2023 y en el que se ha detectado una decena de casos de tuberculosis.
El asentamiento está instalado en el antiguo instituto municipal B-9 de Badalona, entre los barrios del Remei y Sant Roc, y fue ocupado en junio del 2023 por migrantes provenientes de anteriores desalojos en la ciudad.
Según ha avanzado El Periódico, en 2024 Salud Pública de la Generalitat detectó un primer caso de tuberculosis y, desde entonces, tiene constancia de 9 casos más en este espacio.
Salud Pública ha precisado, en un comunicado, que esos 10 casos están bajo seguimiento clínico y que no hay ningún «brote activo» de la enfermedad.
«No tenemos ningún caso que esté transmitiendo la enfermedad, así que lo tenemos controlado en cuanto a lo que es el riesgo», ha señalado en declaraciones a los periodistas el subdirector de Vigilancia y Respuesta a Emergencias de Salud Pública de la Generalitat, Jacobo Mendioroz.
Albiol denuncia una «pesadilla»
En declaraciones a EFE, el alcalde de Badalona, Xavier García Albiol (PP), ha explicado que este antiguo instituto, que es propiedad del ayuntamiento, está ocupado «de manera ilegal» y que se ha convertido en una «pesadilla» para los vecinos.
El consistorio inició en 2023 en los tribunales un proceso de desahucio y ahora está «a punto de recibir la autorización para desocupar» este asentamiento, en el que habrían unas 500 personas, ha señalado el alcalde.
En declaraciones a El Periódico, la jefa de la Unidad de Tuberculosis Experimental del Instituto de Investigación del Hospital Germans Trias Pujol (Can Ruti) de Badalona, Cristina Vilaplana, que sigue los casos del B-9, ha alertado de que el desalojo es «arriesgado desde un punto de vista epidemiológico», por la posibilidad de perder el contacto con los infectados o de que haya más contagios.
Sin embargo, el alcalde de Badalona ha manifestado su sorpresa ante este eventual riesgo sanitario y se ha escudado en el posicionamiento de Salud Pública.
«Si existiera un riesgo tomaríamos las medidas adecuadas, pero he hablado esta mañana con la consellera de Salud -Olga Pané- y me ha dicho que no hay riesgo para la salud pública, y por lo tanto, si esto es así, la desocupación de estas personas seguirá adelante», ha afirmado Albiol. EFE
