Pilar Martín |
Madrid (EFE).- El historietista Bartolomé Seguí ha hecho crecer a dos de sus históricos personajes, Lola y Ernesto, y les ha colocado en su edad, la de los llamados “Boomers”, el título de su último cómic donde reivindica sin filtros que “la juventud está sobrevalorada”. “Nos olvidamos mucho de todo lo que nos espera”, añade.
“Estoy como la Pantoja”, así se siente Seguí (Palma, 1962) en plena promoción de este cómic (Salamandra Graphic) sobre el que no se esperaba “esta respuesta” que está teniendo tras publicarlo: “Me ha pasado como a las embarazadas, que solo ven embarazadas por la calle, y yo sólo escucho hablar de ‘boomers’, no sólo de los del libro, así que la respuesta está siendo “muy buena”, ha declarado a EFE.
Aunque no tiene la respuesta certera a esta acogida lo que sí tiene claro, y así lo dicen sus personajes, es que la juventud está sobrevalorada, por un motivo obvio: “Que todos vamos para el mismo sitio y nos olvidamos mucho de todo lo que nos espera y nos viene, porque al final todos llegamos”.
“Deberíamos de preocuparnos por llegar bien a la madurez y no tanto por rememorar la juventud“, ha matizado este “boomer” (término inglés para nombrar a los mayores de 55 años). Aunque ha volcado mucho de su pensamiento en este cómic, afirma que no es una “biografía” ni una “queja” de esta generación que él cataloga también como “los nuevos cuñados”.
Denomina así a los de su “quinta” porque son los encargados de decir frases como “yo a tu edad… en mi época eso era de otra forma…”.

“No me gustaría que esto fuera una historia triste, no es un cómic quejica, sino al revés, habla sobre que todavía nos falta para la vejez, que estamos en ese punto en que piensas que hay que aprovechar la vida que te queda, que eres el dueño de tus decisiones hasta que otros las tomen por ti”, ha aseverado.
Y desde esa perspectiva Seguí “ha huido” del territorio del reproche pero sin obviar ese “shock” que caracteriza a los de su generación: “Estamos entre descolocados por cómo ha cambiado todo o por cómo los planes o las ideas de futuro luminoso no han sido así. Y además ha ocurrido la pandemia, que nos revolcó”.
No sólo supuso un cambio de vida para todos, sino que en pleno confinamiento fue -tras años adaptando al cómic las novelas de Pepe Carvalho de Vázquez Montalbán- cuando se dio cuenta de que tenía ganas de volver “a esas historias de los 90” y a recuperar personajes a los que les habían pasado por encima 40 años.
Esos jóvenes “a los que les ha pasado por encima la vida” y que aparecieron en obras publicadas a finales de los 80 en la revista “El Víbora” junto a la guionista Sonia Delgado.
Son personajes que hablan de sexo (de cómo a su edad les “toca más el fisio que su pareja”), del trabajo o de política y medios de comunicación.
“Te sientes un poco como vagando por un escenario, que los tiempos han cambiado pero siguen siendo los tuyos y ya no te sientes tan interpelado”, ha lamentado Seguí sobre esta obra que nació sin la intención de que tenga continuidad pese a que es una de las primeras en el cómic nacional que se ocupa de contar con luminosidad lo que le pasa a los “boomers”.