Talla de San Prudencio. La concatedral de La Redonda de Logroño expone hasta el 25 de mayo, las reliquias y obras de arte en torno a la figura de San Prudencio, creadas durante cuatro siglos,. EFE/ Raquel Manzanares

Logroño expone reliquias y obras de arte sobre San Prudencio creadas hace cuatro siglos

Logroño (EFE).- La concatedral de La Redonda de Logroño expone reliquias y obras de arte en torno a la figura de San Prudencio, creadas durante cuatro siglos, recopiladas en diferentes parroquias riojanas en torno al Monasterio de San Prudencio de Clavijo, ahora en ruinas.

La diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño ha presentado este jueves la muestra “El legado de San Prudencio” con la asistencia, entre otros, de su delegado de Patrimonio, Jesús Merino, y el presidente de la cofradía de San Prudencio de Álava, José Ramón Marín.

La concatedral de La Redonda de Logroño expone hasta el 25 de mayo, reliquias y obras de arte en torno a la figura de San Prudencio. EFE/ Raquel Manzanares

Patrón de Álava

San Prudencio, patrón de Álava, vivió en el siglo VI y tras su nacimiento en Armentia, al lado de la actual Vitoria, recorrió zonas de la diócesis de Calahorra, principalmente Soria y Osma, de donde fue obispo; tras su muerte fue enterrado en una cueva en la que posteriormente se levantó el monasterio de San Prudencio de Monte Laturce, en Clavijo.

Sus reliquias se veneran en la concatedral de La Redonda de Logroño, en una capilla en torno a la cual se ha instalado esta muestra con piezas recopiladas en diferentes parroquias y una gran talla de madera del siglo XV, que es la más antigua que se conserva del santo y que ha sido custodiada por una familia de Murillo de Río Leza desde que salió del Priorato de Ribafrecha, una de las dependencias del monasterio de San Prudencio.

El párroco de la concatedral, Víctor Jiménez ha destacado que esta exposición, que puede visitarse hasta el 25 de mayo, “es un acontecimiento histórico y religioso”, ya que es la primera vez, que tras la desamortización del monasterio de San Prudencio “se unen en una exposición todos los objetos devocionales de los que hay constancia en La Rioja”.

El párroco de la concatedral, Víctor Jiménez (d), en la presentación de la exposición. EFE/ Raquel Manzanares

Relicarios y esculturas

Entre otras piezas se exponen bustos relicarios de San Prudencio (Plata policromada. Siglo XV. Concatedral de la Redonda), San Sancho de Funes (Madera policromada. Concatedral de La Redonda) y San Félix del Monte (Madera policromada. Siglo XVI. Ventas Blancas).

También las esculturas de la Virgen de la Antigua (Siglo XIV. Iglesia de Clavijo), la Virgen de Rute (Talla policromada. Siglo XIV. Iglesia de Ventas Blancas), la mitra y guantes del último abad del monasterio (Siglo XVII. Iglesia de Lagunilla); así como dos cuadros con la leyenda de San Félix (Siglo XVIII. Iglesia de Hornillos).

La diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño ha presentado este jueves la muestra “El legado de San Prudencio”. EFE/ Raquel Manzanares

Monasterio protegido por los señores de Cameros

El origen de estas piezas es el monasterio de San Prudencio de Monte Laturce, que, según la historia, tiene su origen en la disputa por el cuerpo del santo, tras su muerte, entre su diócesis, la de Tarazona, o la del el Burgo de Osma, donde falleció; esta controversia se dirimió al cargar el cadáver en una mula, que paró agotada junto a unas cuevas del Monte Laturce.

Debido a su fama de santidad, por sus numerosos milagros, el lugar donde yacían sus reliquias empezó a ser venerado y custodiado por los monjes que acompañaban a la mula y por eremitas residentes en las próximas cuevas de Leza, que terminaron fundando una iglesia, que fue el origen del monasterio a mediados o finales del siglo VII.

El Monasterio creció gracias a la protección de los Señores de Cameros y al inicio del siglo XIII fue donado a la orden del Císter, con la que ganó en posesiones y en número de monjes durante siglos, hasta que empezó a perder influencia a partir del siglo XVII; en la guerra de Independencia fue expoliado y abandonado, inicialmente, y definitivamente dejó de tener actividad tras la desamortización de Mendizábal.