Fotografía de archivo de las hojas de una planta. EFE/Bienvenido Velasco

El cambio climático está afectando a las hojas de las plantas y alterando el ciclo del carbono

Madrid (EFE).- Los cambios en las temperaturas y los suelos provocados por el cambio climático están afectando a las hojas de las plantas y, en consecuencia, al ciclo del carbono, un proceso fundamental para el funcionamiento de la biosfera y para regular el clima de la Tierra.

Así lo ha advertido un equipo internacional de investigadores que ha estudiado los factores que influyen en la forma y en el hábito o tipo de crecimiento de las hojas de las plantas.

El estudio, publicado en la revista Nature Plants, revela que la temperatura influye en el tipo de hoja, perenne o caduca, y en su forma, acicular o ancha.

Además, el equipo ha estimado la distribución global de cada tipología y que entre el 17% y el 34% de los bosques experimentarán un cambio en las condiciones climáticas no adecuado al tipo de hoja que lo caracteriza.

El estudio es importante porque “los bosques albergan la mayor parte de la biomasa vegetal y de la biodiversidad de los ecosistemas terrestres y regulan ciclos como el del carbón o el del agua”, explica Fernando Valladares, del Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN) y coautor del estudio.

El papel crucial de las hojas de las plantas

Y en todas estas funciones, “las hojas de las plantas tienen un papel crucial ya que, a través de procesos como la fotosíntesis, distribuyen la energía solar e intervienen en el ciclo del carbono”, apunta el investigador.

Para hacer el análisis, el equipo usó datos de 9.781 inventarios forestales, y de registros completos de la forma y el hábito de las hojas a nivel de especie.

“Los resultados mostraron que la isotermia (constancia en las temperaturas) frente a la variación estacional, junto con características del sustrato como su textura y acidez, determinan globalmente la aparición de plantas con hoja caduca o perenne”, dos factores que están cambiando globalmente, dice Valladares.

Por otro lado, “la temperatura del periodo más frío del año, algo que también se está modificando, es clave para determinar si predominan plantas con hojas en forma de aguja, más adaptadas a ambientes extremos, o con hoja ancha”, avisa.

El estudio detalla que, a nivel mundial, el 38% de los árboles tienen hoja perenne y acicular (un 21% de la biomasa superficial), el 29% perenne y ancha (un 54% de la biomasa superficial), el 27% caduca y ancha (un 22% de la biomasa superficial) y el 5% caduca y acicular (un 3% de la biomasa superficial).

“Si las emisiones de carbono continúan según lo previsto, también estimamos que entre el 17 y el 34% de los bosques del mundo experimentarán cambios en la temperatura que afectarán al tipo de hoja característico de cada especie arbórea, incrementando la presión ambiental que ya sufren”, advierte Valladares.

Para el investigador, “dada su relevancia en el equilibrio de los ecosistemas terrestres, estos datos son importantes para dirigir futuras acciones de conservación y para afinar más en los cálculos del carbono que se almacena en los ecosistemas terrestres”.