En la imagen, una tortilla al estilo Betanzos, con el huevo poco cuajado. EFE/Cabalar

Qué sabemos del caso de las tortillas de patatas y el botulismo

Madrid (EFE).- La retirada de tortillas de patatas envasadas de varios supermercados por razones sanitarias se ha convertido en uno de los temas “estrella” de esta semana. ¿Qué ha pasado con ellas? ¿No es seguro comer tortilla de patata envasada? ¿Qué es el botulismo? Repasamos qué se sabe hasta el momento:

¿Qué ha ocurrido?

La voz de alerta se dio en Italia, el pasado 11 de julio. Las autoridades del país notificaron a través del Sistema de Alerta Precoz y Respuesta de la Unión Europea (EWRS) dos casos de botulismo en personas que habían consumido tortilla de patata envasada en España. 

Tres días después, el 14 de julio, fueron Madrid y la Comunidad Valenciana las que notificaron a la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica (Renave) otros dos casos compatibles con el botulismo después de ingerir el mismo alimento.

Fue entonces cuando la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) empezó a investigar el brote de botulismo. ¿El vínculo común? Que los afectados habían tomado en los días previos de tortilla de patata envasada adquirida en diferentes supermercados de varias comunidades autónomas.

¿Quién fabrica las tortillas?

Todas las miradas apuntan al grupo riojano Palacios, que vende tortillas con su marca pero también es proveedor para la marca blanca de varias cadenas de supermercados, aunque hasta el momento no se ha podido establecer una evidencia, ni en los productos ni en los procesos, que relacionen directamente el producto con la toxina botulínica.

Esta misma madrugada la compañía publicó un comunicado en el que instó a todos los consumidores que hayan comprado sus tortillas envasadas a que “se abstengan de consumirlo y procedan a su devolución al punto de venta en el que lo adquirieron, donde será reembolsado su importe”.

Una señora mira los precios en el supermercado Eroski
Uno de los supermercados afectados por vender tortillas envasadas de Palacios ha sido Eroski. En la imagen, un supermercado de la cadena en la capital vizcaína. EFE/Luis Tejido

Concretamente, solicita no ingerir tortillas envasadas bajo las marcas Chef Select, Auchan, Eroski, Unide, Consum, DIA, Ametller, Condis, El Corte Inglés, Carrefour, Alipende y Rikissimo.

La empresa dice también haber decidido “voluntariamente, por precaución, retirar de los lineales de los puntos de venta la tortilla de patatas envasada fresca al plato producida en la fábrica de Mudrián (Segovia), así como detener temporalmente su fabricación”. No obstante, sostiene que “no se ha podido establecer una evidencia, ni en los productos ni en los procesos, que relacionen causa efecto” con respecto a esta empresa como fabricante del producto, como aseguraba el martes en una nota informativa la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN).

El fabricante, con sede en La Rioja, es una de las principales empresas de alimentación en España y cuenta con una facturación superior a los 250 millones de euros anuales. Fundada en Albelda de Iregua en 1960, emplea a más de mil personas y cuenta con cinco plantas de producción en España y una en Estados Unidos. La compañía opera en las categorías de chorizos y embutidos, tortilla española, pizzas refrigeradas y repostería congelada.

¿Dónde se vendían?

Como reveló el propio fabricante, sus tortillas se comercializan en varias cadenas de supermercados (a través de su marca pero también a través de otras marcas blancas).

Entrada de un supermercado Ahorramas en Madrid
Entrada de un supermercado Ahorramas en Madrid. EFE/Fernando Alvarado

Los primeros en anunciar la retirada de sus tortillas de los lineales fueron los supermercados Ahorramas y Eroski. La cadena madrileña informó de su decisión el pasado lunes 17 y colocó carteles en sus tiendas pidiendo a quienes hubieran comprado que las devolvieran para el reembolso del importe.

¿Cómo avanza la investigación?

Ahora continúan las investigaciones con la colaboración de la empresa de producción. También se está estudiando la posibilidad de que exista algún producto en el mercado que no sea seguro o de que existan desviaciones en los procesos productivos y de transporte que justifiquen la existencia de ese riesgo.

¿Qué es el botulismo y cuáles son sus síntomas?

El botulismo es una enfermedad grave que puede llegar a ser mortal si no se diagnostica y trata precozmente. Los síntomas empiezan por fatiga, debilidad y vértigo y siguen por visión borrosa, boca seca, disfagia o disartria y otros neurológicos que se desplazan de los hombros hacia abajo.

Está causado generalmente por la ingesta de alimentos contaminados con toxinas producidas por la bacteria Clostridium botulinum y rara vez por algunas cepas de Clostridium baratii. También puede producirse por heridas abiertas o tratamientos cosméticos.

Los alimentos más frecuentemente asociados con el botulismo son las conservas caseras, sobre todo vegetales como guindillas en aceite, espárragos, judías verdes; pescados, incluido el atún en lata y los fermentados, salados y ahumados; y productos cárnicos.

Imagen de archivo del Hospital Clínico de Valencia
Imagen de archivo del Hospital Clínico de Valencia. EFE/ Kai Försterling

Se trata de una enfermedad de declaración obligatoria en España y “ante un brote la declaración desde las comunidades es urgente”. Todas las muestras de los casos afectados se están procesando en el Centro Nacional de Microbiología.

Entre 2015 y 2022 inclusive, España ha detectado un total de 88 casos de botulismo (lo que arroja una media anual de 11 casos), de los que 20 fueron sospechosos, 20 probables y 48 confirmados.

Según la OMS, la mortalidad se sitúa entre el 5 % y el 10 % de los casos pero si se diagnostican y tratan precozmente, la mayoría de pacientes se recuperan. De ahí la necesidad que actuar rápido acudiendo a los servicios médicos de urgencias o llamando al 112.

¿Cuántos casos hay confirmados?

Según el CCAES, los afectados de botulismo se mantienen en siete, ahora con cinco confirmados -además del de Madrid, los dos ciudadanos italianos que compraron una de estas tortillas en Valladolid el 30 de junio y otras dos personas de Asturias y Galicia- y dos probables, uno en Málaga -una persona de 27 años que no ha necesitado hospitalización- y la Comunidad Valenciana.

¿Qué puedes hacer como consumidor?

La asociación de consumidores Facua ha reclamado “clarificar cuanto antes el origen del brote” y ha señalado que “obvio” que no se debe consumir ninguna tortilla de la marca “como medida preventiva con independencia de que estuvieran o no afectadas”.

La Aesan ya ha pedido a las comunidades autónomas que verifiquen la retirada de las tortillas fabricadas por el grupo Palacios de las tiendas.

La OMS recuerda a los consumidores la importancia de respetar principios básicos de seguridad e higiene. Conservar los alimentos en frío y seguir las indicaciones de consumo. En el caso de las tortillas de patata envasadas, deben mantenerse refrigeradas, nunca a temperatura ambiente.

La AESAN ha instado a seguir las instrucciones de uso indicadas por los fabricantes. Estas garantizan la seguridad de los productos para los que se establece una fecha de caducidad.

En la imagen, una tortilla al estilo Betanzos, con el huevo poco cuajado
En la imagen, una tortilla al estilo Betanzos, con el huevo poco cuajado. EFE/Cabalar

Esto es especialmente importante en el caso de las tortillas de patata envasadas. Puede tenerse “la falsa sensación” de que son como las conservas, que tienen estabilidad térmica. Pero mantenerlas sin refrigeración a la temperatura ambiente actual puede derivar en problemas de salud.

Por otro lado, el grupo Palacios ha puesto a disposición del cliente una línea telefónica con el número 941 27 77 00 en horario de 10:00 a 18:00 horas y el correo electrónico [email protected] “para aclarar cualquier duda o inquietud”.