Mercedes Martínez I Córdoba, (EFE).- El boom inmobiliario de los años 70 fue el detonante para que siete personas del barrio de San Basilio, o del Alcázar Viejo como se le conoce en Córdoba, constituyeran la Asociación de Amigos de los Patios Cordobeses, que este año celebra su cincuentenario en honor a unos recintos parte de su historia.
La construcción de grandes bloques de pisos puso en riesgo la supervivencia de las casas tradicionales de la zona en la que la vida se hacía alrededor de un patio y eso fue el germen de la actual asociación, “que no se perdieran los patios”, según ha detallado a EFE el presidente de la Asociación de Amigos de los Patios Cordobeses, Miguel Ángel Roldán.
Para preservar la pervivencia de estas casas, siete personas que vivían en San Basilio fundan la asociación y deciden comprar el mayor número posible de patios pero “el boom inmobiliario hizo que sólo les diera tiempo a comprar dos”, que “aunque las adquirieron los siete con su patrimonio, las pusieron a nombre de la asociación”.
Con el paso del tiempo, los vecinos del casco histórico de Córdoba y de San Basilio, que es donde se concentran la mayoría de los patios, se ha ido concienciando de la importancia y el valor cultural de estos recintos y ello ha provocado que “se hayan recuperado muchos que estaban perdidos” porque “las nuevas generaciones vuelven a vivir aquí”.
No perder su esencia
En aquel momento “tanto la estética como el colorido” eran muy diferentes al actual porque entonces “había muy pocas macetas en los patios y no se cuidaban los detalles como ahora”.
Desde el principio, el objetivo de la asociación es velar por el mantenimiento de estos patios. Y divulgar para que “no se pierda su esencia”. Además de organizar “un poco” lo que es el Concurso de Patios, cuya primera edición se celebró en 1921, auspiciado por el Ayuntamiento de Córdoba. Aunque no de forma ininterrumpida, ya que durante la guerra civil española no se festejó.
Su celebración se retomó en la década de los cuarenta, ya de forma ininterrumpida, aunque en el año 2020 tuvo lugar en el mes de octubre en lugar de en mayo como es tradicional.
El Concurso de Patios tiene lugar a iniciativa de los propios vecinos que son los que abren las puertas de sus casas, aunque “claro no tiene nada que ver cuando comenzó con la actualidad, los visitantes entonces eran, sobre todo, de la propia ciudad” y pocos que venían de fuera para ver “estas maravillas”, relata Miguel Ángel Roldán.
El trabajo de promoción y divulgación de la fiesta de los patios auspiciado por la Asociación de Amigos de los Patios Cordobeses tuvo su punto de inflexión cuando los Patios fueron declarados Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco en 2012.
Fue a partir de ese año, según ha explicado Roldán, cuando la fiesta de los Patios “ha ido aumentando su conocimiento y todo el mundo quiere venir a verlos”.
Masificación de la fiesta
La masificación que sufre desde hace unos años la fiesta, en las dos semanas que dura el certamen, puede “ser contraproducente algunas veces” porque “creo que no esperábamos la repercusión que ha tenido” la labor de promoción que han hecho, ha asegurado el presidente de la Asociación de Amigos de los Patios.
Respecto a la posibilidad de desestacionalizar esta Fiesta, Miguel Ángel Roldán ha reconocido que las visitas a los patios tienen demanda durante todo el año, hasta con las altas temperaturas de los meses de julio y agosto, época en la que, demás las flores no están “en su mejor momento”.
De hecho la sede de la Asociación de Amigos de los Patios abre sus puertas durante todo el año, excepto agosto, al igual que un grupo de propietarios de estos recintos que están ofertando una ruta de visitas de cinco patios.
Sin embargo, a las flores también hay que darles “un respiro”, necesitan recuperarse de las visitas y del ruido y, por ello, hay veces en que lo mejor es dejarlas “que vuelvan a su tranquilidad”.
Cambio climático
Se ha mostrado preocupado por la influencia que puede tener el cambio climático en los patios y ha reflexionado que “en algún momento, probablemente yo no lo veré, pero tendremos que adelantar el concurso al mes de abril”.
En este sentido ha puesto como ejemplo las flores del patio de la asociación, “que quedan más de quince días para que comience el concurso y ya están en su apogeo, no creo que aguanten bien hasta entonces”.
En opinión de Miguel Ángel Roldán, no existe la posibilidad de que con la Fiesta de los Patios se “muera de éxito porque estas bellezas naturales va a ser complicado que mueran”.
Asegura que el relevo generacional para cuidar los patios que fue un problema hace algunas décadas, ahora no existe como tal porque “van surgiendo de las generaciones más jóvenes que vuelven a instalarse en las casas con patio”, tanto del casco histórico como de San Basilio. EFE
