València (EFE).- El Ayuntamiento de València ha activado este viernes el protocolo municipal de medidas que se tienen que adoptar durante los episodios de alta contaminación en la ciudad y aconseja, entre otras acciones, evitar la práctica de ejercicios físicos al aire libre y el uso del transporte publico.
En esta ocasión se ha puesto en marcha porque cuatro estaciones de medición registraron ayer un promedio diario de PM10 (pequeñas partículas sólidas dispersas en la atmósfera) superior a 50 µg/m³ (micrómetro/metro cúbico), por unas condiciones meteorológicas que no favorecen la dispersión de los contaminantes, informa el consistorio.
Con los datos estas estaciones -las de la Avenida de Francia, Cabanyal, Olivereta y Patraix- la ciudad se encuentra en un episodio de Tipo 1, lo que hace necesaria la activación del mencionado protocolo.
Esta situación implica la aplicación de medidas para informar a la población especialmente sensible como mayores, niños y personas con patología respiratoria o cardiovascular, así como personas con enfermedades crónicas, como la diabetes, e inmunodeprimidas y embarazadas.
Condiciones meteorológicas que impiden la dispersión de las partículas
Los informes técnicos detallan que las superaciones se deben probablemente a las condiciones meteorológicas anticiclónicas de los últimos días, caracterizadas por altas presiones, temperatura y humedad elevadas, sin apenas vientos.
Además, según uno de los modelos consultados por el Ministerio para la Transición Ecológica, en el día de hoy podría haber también una cierta aportación de masas de aire sahariano, si bien en concentraciones bajas.
Ante esta situación, el Ayuntamiento recomienda el uso del transporte público en los desplazamientos, la conducción eficiente, suave y, en la medida de lo posible, sin paradas y arranques bruscos.
Asimismo, el consistorio invita a la ciudadanía para que minimice el consumo energético y limite la quema de rastrojos y restos agrícolas.
Esta información tiene que llegar a centros de salud, y hospitales de la ciudad, así como a residencias de ancianos y centros de día, tal como contempla el protocolo que se activa mientras los servicios municipales realizan el seguimiento de los niveles de PM10.
El protocolo dejará de tener efecto tan pronto se restablezcan las condiciones óptimas de calidad del aire.
